25 Abril de 2018 10:35

La pintoresca ciudad chilena de Valparaíso fue escenario de un brutal crimen que tuvo como víctima a un niño de 7 años asesinado a golpes por su abuela, quien tenía su custodia desde el 2016.
La policía chilena fue alertada por los médicos que atendieron al niño.
El hecho fue descubierto cuando la asesina llevó al niño a la guardia del hospital Mario Sánchez, asegurando que sufría de una súbita apendicitis.
Sin embargo, los médicos hallaron lesiones en las piernas que parecían haber sido causadas por un objeto contundente, por lo cual dieron aviso a la policía.
Palos y patadas
Cercada por las preguntas de la Brigada de Homicidios chilena, la abuela confesó el crimen asegurando que no era su intención matar a su nieto. El aberrante crimen fue cometido con golpes realizados con un palo de escoba y puntapiés.
La abuela confesó el asesinato.
De acuerdo al fiscal Elizardo Tapia, la mujer habría atacado al niño porque éste no quería comer. Después de la autopsia, se determinó que la muerte fue provocada por una contusión abdominal cerrada, con rotura de duodeno e intestino grueso.