07 Enero de 2016 07:11

Aunque Juana Viale engrosó el año pasado de modo sustancial su patrimonio, la nieta de Mirtha Legrand decidió tomarse unas “modestas” vacaciones por el sur argentino y chileno. Sin sus hijos, quienes permanecen al cuidado de su padre, Gonzalo Valenzuela, la ex Showmatch se mostró desprolija y comiendo “al paso” sándwiches de mortadela en almacenes ruteros.
La hermana de Nacho Viale pasó por el almacén de Diego Parra, un comerciante de Chubut.
Mientras el resto del clan disfruta de las comodidades de Casablanca, la mansión de 3.5 millones de dólares que la conductora posee en el exclusivo balneario uruguayo de José Ignacio, la ex de Santiago “Chano” Moreno Carpentier optó por agarrar la ruta y alejarse de la demandas “fashion” de la costa charrúa.
Casablanca: la mansión de 3.5 millones de dólares en la que veranean los Legrand-Tinayre.
Sin maquillaje, con poco aseo y un look alejado del que suele mostrar en las alfombras rojas, la embajadora de Carolina Herrera en el país se puso todos los colgantes “artesanales” que encontró en su departamento de Barrio Norte y partió rumbo a Chubut.
Calzas y buzos: Juana dejó de lado los vestidos de diseñador que le regalan por ser la nieta de Mirtha.
La primera parada pública fue en Trevelin, un pueblo ubicado a 24 kilómetros de Esquel, en el que se la vio comprando (y armando) sándwiches de mortadela en la despensa de Diego Parra, un comerciante local que no dudó en venderle el fiambre y pedirle una foto para recordar el paso de la hija de Marcela Tinayre por su local.
Según ella misma relató en el almacén, su siguiente destino fue el pueblo chileno de Futaleufú, a sólo 40 kilómetros del paso fronterizo. Y, claro, la foto con otros comerciantes locales no tardó en viralizarse en las redes sociales.
Por la facturación millonaria bailó Juana
La hermana de Nacho Viale se sumó en abril a la pista de baile de Marcelo Tinelli y, aunque se encargó de desestimar los rumores que aseguraban que había firmado un jugoso contrato para bailar, la información que circuló hablaba de un contrato de 200 mil pesos por mes.
La hija de Marcela Tinayre habría facturado 1.400.000 de pesos tras su paso por Showmatch.
Mimada por el jurada y nunca expuesta al voto telefónico (hasta que Celeste Muriega la eliminó en agosto con el aplastante 52.05 por ciento), la morocha permaneció 159 días en el concurso televisivo y fue sobrevivió junto a su partenaire, Facundo Arrigoni, a 13 ritmos. Fueron siete meses de “previas” evasivas y polémicos móviles, pero 22 semanas por las que habría facturado 1.400.000 pesos.
Además de sus ingresos por Showmatch y de los canjes que consigue por sus vínculos familiares, la ex de Iván de Pineda sumó, además, el dinero que obtuvo por su primer protagónico en teatro: La sangre de los árboles. La obra, que también produjo, se presentó en el Centro Cultural San Martín y en el Centro Cultural Mori en Santiago de Chile (de Valenzuela y Benjamín Vicuña).
Por último, la morocha también grabó en 2015 dos películas: Tuya (de Edgardo González Amer) y Baires (de Marcelo Páez-Cubells). Sumó, además, una participación en la mini serie protagonizada por Gabriel “el Puma” Goity, Ana Celentano y Mario Alarcón, Malicia.