Zapatos y lujo: los caprichos fashion de la hija de Wanda Nara

De tal palo, tal astilla. Wanda Nara aguarda la llegada de su quinto hijo (el cuarto varoncito) en Milán, mientras se divierte con las travesuras de su única nena: Francesca, de un año. Ahora, la heredera fashionista de la botinera confirmó que, al igual que su madre, ama los tacos. También tiene un vestidor que es la envidia de más de una mediática local. Tiembla el bolsillo de Mauro Icardi.

“Un año y su ataque por los tacos”, fueron las palabras que escribió Wanda al compartir el video en el que se puede ver a la beba desesperada por ponerse los zapatos de su madre. Vestida sólo con una remera rockera de Los Ramones, la menor del clan logró su objetivo y se quedó con el costoso calzado.

Este no es el único fetiche fashion de Francesca. Hace sólo una semana, su madre ya había compartido una foto en la que mostraba que la beba ya le pide que le pinte las uñas. Y elige, claro, el mismo tono que su mamá.

“Imposible pintarme sin que Francesca me obligue a que primero su manito (Sic). Con sólo un año”, escribió la mujer de Icardi y mostró la foto en la que se las puede ver a ambas con el mismo gris en sus manos.

La consentida de Wanda también es dueña de un envidiable vestidor () que cuenta con diseños de las marcas más prestigiosas del mundo: desde Dolce & Gabbana hasta Louis Vuitton. ¿Su última incorporación? Un traje de baño Burberry que se consigue por 95  dólares (es decir $ 1425).

La pequeña no sólo tiene baberos de Gucci e Yves Saint Laurent, sino que además disfruta del nivel de vida familiar desde el millonario penthouse familiar de Milán (). Fiel compañera de su mamá, la beba también la acompaña a la peluquería y cuida sus manos con profesionales.

Además, "Franchu" viaja seguido y con estilo. Sólo en el último año, .  y un porta pasaporte con sus iniciales, cuyo valor asciende a los 42.250 pesos.

La pelea que se viene será, claro, la de las herederas de las Nara. Y es que, aunque el amor familiar prevalecerá, las pequeñas ya muestran estilos muy distintos (elegidos, claro, por sus madres). .