Cintia Belén está emocionada y no es para menos: hace sólo 24 horas salió a la luz Puente, su última producción musical en la que combina bases poperas con destellos de sonidos flamencos que no hacen más que emocionar a todos.
Algo que no se puede desconocer de la artista marplatense es que es un viaje de ida: quien sólo haya escuchado su música debe saber que también es bailarina de Fuerza Bruta AVEN y que también fue parte de proyectos artísticos de otras estrellas argentinas como la genial Lali y la adorada Tini Stoessel.

Está claro que Cintia no pierde el tiempo: Puente no es sólo un disco maravilloso sino que tiene una contraparte audiovisual en la que los espectadores se sumirán en un largo camino en el que serán parte de historias de amor y desamor que combinan partecitas de la vida de alguien que va por la vida enamorándose y cayendo también en los peores desamores.
Puente es también un retrato de una mujer caminada, leída y atravesada por el arte musical que combina la danza como una forma de vida. Ahora, Cintia Belen presenta su disco con un show prometedor en el que se entremezclan la poesía, la danza y la música, tres aristas en las que ella se sumerge naturalmente, casi como un pez en el agua.
En exclusiva para BigBang, Cintia devela los secretos mejor guardados sobre Puente, sobre sus inspiraciones más cercanas y también se posiciona políticamente sobre cómo es generar arte en un contexto en el que la cultura parece estar completamente dejada de lado: "Es necesario tomar un momento de silencio porque en los instantes más desoladores aparece con mucho brillo la creatividad y desde la creatividad es que podemos crear cosas que tal vez ni siquiera nos imaginamos", reflexionó.
A continuación, la charla completa.
¿Qué parte de de tu profundo deseo fue el que te llevó a componer Puente?
Lo principal que me inspira es poder lograr compartir a través de mis mundos internos y de mi historia un proceso de transformación, de pura genuinidad, de autenticidad a través del arte. Es una transformación muy personal de mí misma y un paso de la persona que era a la persona que soy y así sucesivamente.
¿Quién era la persona de antes y quién sos ahora?
Sobre todo tiene que ver con el encuentro de un norte propio. Siempre fui una persona que se sintió muy influenciada por los vínculos, sobre todo las parejas que he tenido en mi vida y he depositado mucho en esos vínculos. Luego de experiencias que me llevaron a tener que enfrentarme a mundos oscuros, surge el gran tesoro a través de la música y de varias ramas del arte porque me gusta mucho la poesía. Fue un gran proceso de sanación hacia el encuentro conmigo misma, hacia encontrar qué es lo que yo deseo como norte personal, individual, qué pasa más allá de lo que tengo a mi alrededor, qué es lo que quiero, deseo, a lo que aspiro y desde ese lugar... poder compartirme con un otro. Eso es lo más grande que he conquistado a través de este proceso de componer Puente.
Se nota que la danza es un aspecto transversal en tu carrera... ¿Qué cosas podés expresar desde la danza y qué cosas comunicás desde la música?
Es muy difícil fusionar todas las cosas. A veces hay una presión por tener que elegir algo porque 'el que mucho abarca poco aprieta' y, si bien hay un punto en el que eso es cierto y es esencial el foco sobre el objetivo que queremos lograr, al mismo tiempo todo este proceso me permitió comenzar a explorar cómo fusionar todas estas cosas que a mí me gustan.
Si hay algo claro que tiene que ver con lo que me da la danza es una posibilidad de descargo y de expresión a través del movimiento del cuerpo; y la música me permite empatizar con otras personas, me permite compartir en un lenguaje un poco más comprensible las historias que nos pasan y que muchas veces compartimos de diferentes maneras.
La danza nos regala esa posibilidad de conectar a través del cuerpo con un otro y entendernos desde un lenguaje que no es hablado. Pero llegó un momento en mi vida en el que sentí que me quedaba chico el espacio del cuerpo y entonces ahí empezaron a surgir las palabras, las melodías y otras formas de comunicar.
¿Por qué tu música tiene esas raíces flamencas que enamoran?
Es una historia loca porque empecé a escribir canciones y no tenía ni idea por qué me salía naturalmente expresarme de esa manera. Yo reconozco que tiene mucho más que ver con mi manera de interpretar las canciones que tiene ahí una una raíz flamenca, una raíz española.
Y no tenía ni idea de dónde venía eso hasta que, hace muy poco, a raíz de de componer la última canción que saqué que fue A mis Ancestros (que fue una gran proceso de sanación de todo lo que traemos en nuestras raíces desde el plano consciente e inconsciente y poder liberarnos para trascenderlo) ahí conecté mucho con mis raíces españolas sin saberlo.
A mis Ancestros es una canción que compuse estando en España y cuando la compongo a los días mi mamá me me dice, 'Vos ¿cómo sabías que tenés raíces andaluzas. Un tatarabuelo tuyo era andaluz', contó Cintia entre risas.
Qué hay detrás de la producción de tus videos, sobre todo Desnuda, que compartís con Kris Alaniz...
Es un trabajo pensado y es un trabajo sentido sobre todo. El trabajo de los videoclips fue algo que a mí me enseñó muchísimo porque comencé de más a menos. A través de que íbamos trabajando empezaba a comprender que tal vez menos información podía conducir mejor el mensaje.
Entonces, por eso la gente va a ver un montón de cosas diferentes, desde videos muy simples, como lo son Desnuda, que cuenta esta historia de encuentro entre dos mujeres. Y después hay otros videoclips que tienen un montón de información y están buenísimos donde bailo también y son mucho más poperos, van por otra línea.
En cuanto al encuentro con Kris, este video particular relata mi camino personal: el encuentro con una mujer, con las experiencias variadas en cuanto a los vínculos, con los libres juicios al respecto, con las libertades de explorar y de experimentar que todos deberíamos tener o sentir.
Fue muy hermoso ese encuentro porque a mí me interesaba mucho fusionar el rap con mi música porque la lírica y la poesía me interesan mucho. Entonces, hacer un feat con un artista como ella, que tiene como pilar la letra, la palabra, te da la libertad de poder decir muchas cosas. Fue muy fluido ese feat, la verdad.
¿Cómo te parás vos frente a este contexto de financiación de la cultura? ¿Cómo es hacer música en este contexto?
Yo me siento en un lugar de mucho privilegio frente a la situación que estamos atravesando como país. Es complejo vivir del arte. Me encuentro en una situación de privilegio porque tengo un entorno que me apoya en todos los niveles: económico, a nivel de trabajo y tiempo.
Creo que con amor y con mucha convicción se pueden realizar los proyectos. Por eso es importante cultivar las relaciones significativas y aprender a recibir también; a veces los recursos vienen de la gente que te apoya, de la gente que confía a veces más en vos de lo que uno confía en sí mismo y ahí vamos aprendiendo.
Me gusta poder desprender mi arte de lo político, pero también comprendo que toda acción artística es política porque expresa, porque se manifiesta y eso es importantísimo en el arte. Creo que no podríamos vivir sin el arte y que no importa lo que pase, el arte es algo imposible de destruir. Siempre vamos a estar ahí, los artistas y las personas que hacen arte.
Esto es a veces un arma de doble filo, porque si siempre mostramos que se puede, incluso cada vez teniendo menos... Es difícil. Pero justamente es el acto paradójico que nosotros tenemos que comprender y que hay que hacer lo mejor que podemos, con lo que tenemos en el momento en el que estamos. Yo trato de no quejarme tanto y agarrar lo que tengo y de hacer lo mejor que puedo y compartirlo.
Eso se va expandiendo y en algún momento da sus frutos. Si yo tuviese que dar un mensaje a las personas que tienen ganas de hacer y de repente sienten que les faltan los recursos, creo que a veces es necesario tomar un momento de silencio porque en los instantes más desoladores aparece con mucho brillo la creatividad y desde la creatividad es que podemos crear cosas que tal vez ni siquiera nos imaginamos. Este es un poco mi viaje.
¿Qué van a vivir les espectadores este 6 de junio?
El 23 de mayo está saliendo el álbum que vamos a lanzar junto con unos visualizers hermosos que vamos a estrenar en YouTube. Todo lo que sucede en los en los videos va a ser lo que vamos a llevar al escenario, esta función de todo lo que soy.
A mí me gusta mucho escribir poesía y siempre en mis conciertos comparto textos, que de hecho son a veces la partecita del concierto donde la gente conecta en profundidad con un mensaje. Eso va a ser algo que podría ser el hilo conductor de toda la historia que vamos a contar a través de estas canciones.
Es un híbrido entre un concierto y una obra, va a haber invitados hermosos, cantantes muy talentosas, una banda hermosa y va a ser en un teatro precioso que es Teatro NÜN (Juan Ramírez de Velasco 419, CABA). Vamos a hacer parte al espectador en determinados momentos específicos porque esta historia la cuento con la gente, no la cuento sola.
Vengan, porque estoy segura que no van a salir igual a como entraron. Es que así como Puente es un disco que cuenta y transita a toda una transformación, la idea es que la gente también se vaya con con la sensación de transformación interna o por lo menos de cuestionarse ciertas cosas que de ahí en adelante los lleven hacia nuevos lugares, donde se abren nuevas puertas dentro de sus de sus mentes.