Desde este viernes, rige el primero de los tres aumentos escalonados en las tarifas de los colectivos que circulan por el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) bajo jurisdicción nacional. La medida, aprobada por la Secretaría de Transporte a través de la Resolución 28/2025 y publicada en el Boletín Oficial, establece una suba del 21,52% que se aplicará de manera progresiva entre mayo, junio y julio, con el objetivo de amortiguar su impacto en los usuarios.
El ajuste afecta a 103 líneas de ómnibus que operan dentro del AMBA con control del Gobierno nacional. El resto de las líneas, es decir, aquellas reguladas por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires, continuarán con su propio esquema de actualización mensual, basado en la evolución del índice de precios al consumidor (IPC) más un 2% adicional. En ese marco, para junio ya está previsto un incremento del 4,8%. Para las líneas "Suburbanas Grupo I", que conectan la Ciudad de Buenos Aires con el primer y segundo cordón del conurbano bonaerense, los nuevos valores vigentes desde este viernes son los siguientes:
- 0-3 km: $397,11 (SUBE sin nominar: $631,40)
- 3-6 km: $442,38 (SUBE sin nominar: $703,38)
- 6-12 km: $476,46 (SUBE sin nominar: $757,57)
- 12-27 km: $510,57 (SUBE sin nominar: $811,81)
- Más de 27 km: $544,45 (SUBE sin nominar: $865,68)
En tanto, las líneas "Suburbanas Grupo II", que conectan la Ciudad con localidades más alejadas como La Plata o Zárate, también registran incrementos. El boleto mínimo pasó a costar $522,46, mientras que los valores por kilómetro ascienden a $20,18. En todos los casos, quienes utilicen una tarjeta SUBE sin registrar deberán pagar una tarifa considerablemente más alta, como parte del nuevo esquema que busca incentivar la nominalización del plástico.
El 18 de junio se aplicará la segunda etapa del aumento. En esa fecha, por ejemplo, el boleto mínimo en el Grupo I será de $424,91, y el máximo (más de 27 km) alcanzará los $582,56. Para el Grupo II, el boleto mínimo trepará a $559,03, con una tarifa base por kilómetro de $21,59. La última suba está programada para el 16 de julio. Desde entonces, el pasaje en los trayectos cortos (0-3 km) del Grupo I costará $451,01, y el más extenso llegará a $618,35. En el caso del Grupo II, el boleto mínimo ascenderá a $593,37 y el valor por kilómetro será de $22,92.
El nuevo esquema tarifario se enmarca en la política del Gobierno nacional de reducir los subsidios al transporte, trasladando progresivamente mayores costos al usuario. La actualización escalonada responde, según la Secretaría de Transporte, a la necesidad de "dar previsibilidad y sostenibilidad al sistema", aunque las críticas no tardaron en llegar por parte de usuarios y organizaciones del sector, que advierten sobre el creciente impacto del transporte público en los ingresos mensuales de los trabajadores.
El aumento también vuelve a poner el foco en la segmentación tarifaria por tipo de tarjeta SUBE, que penaliza a quienes aún no han registrado su tarjeta, estableciendo una diferencia de hasta un 60% en algunos tramos. Esta política se enmarca en los intentos del Gobierno por avanzar en una mayor trazabilidad de los subsidios y fomentar la identificación del usuario en el sistema. Con este nuevo ajuste, el costo de viajar en colectivo en el AMBA continúa escalando en paralelo con la inflación, en un contexto económico cada vez más complejo para millones de personas que dependen del transporte público para movilizarse diariamente.