En un caso que conmocionó a la ciudad de Mar del Plata, una adolescente tomó un acto de valentía al denunciar en su escuela que su madre estaba siendo mantenida cautiva por un hombre, quien además ejercía violencia contra ella y sus hermanos.
El incidente, que pone en evidencia la persistente problemática de la violencia de género y el abuso intrafamiliar, ha generado un profundo debate sobre las medidas de protección para las víctimas y la actuación judicial en estos casos que se ve disminuída desde la asunción de Javier Milei en Argentina que niega los casos de violencia contra las mujeres.

El hecho salió a la luz cuando la joven, estudiante de la Escuela Secundaria N° 60, pidió hablar con las autoridades educativas para revelar la aterradora situación que vivía en su hogar. Según su testimonio, su madre era retenida contra su voluntad por un hombre de 33 años, quien solo le permitía salir de la vivienda para llevar a sus hijos a la escuela. Durante estas salidas controladas, la mujer aprovechó para ratificar lo denunciado por su hija ante la directora del colegio.
La denuncia fue rápidamente trasladada a las autoridades policiales, quienes actuaron con celeridad. Un operativo llevado a cabo en una vivienda del barrio Parque Hermoso permitió el rescate de la mujer y sus hijos, incluido un menor de 5 años que se encontraba en el domicilio al momento de la intervención. Las víctimas fueron trasladadas al Hogar Galé, donde quedaron bajo resguardo y protección.
Sin embargo, el caso no solo ha generado indignación por las condiciones de abuso y secuestro relatadas, sino también por las decisiones judiciales posteriores: durante un allanamiento en la vivienda del agresor, se encontraron dos armas de fuego —una pistola Bersa calibre 380 y una Taurus 9 mm— que, aunque registradas legalmente, representan un claro riesgo para las víctimas. A pesar de ello, las armas no fueron decomisadas, lo que generó críticas sobre la falta de medidas más contundentes para garantizar la seguridad de la mujer y sus hijos.
El Juzgado de Familia N° 5 de Mar del Plata dictó una restricción de acercamiento para el agresor, prohibiéndole cualquier contacto con su pareja e hijos. La valentía de esta adolescente al denunciar lo ocurrido pone en evidencia una realidad que muchas familias enfrentan en silencio.
Las pruebas de que la violencia de género sí existe
La violencia de género en Argentina continúa siendo una problemática alarmante y urgente. Según el informe del Observatorio "Ahora Que Sí Nos Ven", entre el 1° de enero y el 29 de abril de 2025, al menos 94 mujeres fueron asesinadas por razones de género, lo que representa un aumento significativo respecto al mismo período del año pasado, cuando se registraron 78 casos. Además, se contabilizaron 143 intentos de femicidio, la cifra más alta desde 2021.
El contexto político actual, encabezado por el gobierno de Milei, genera profundas críticas por sus discursos que minimizan la gravedad del femicidio y por los recortes en recursos destinados a la prevención de la violencia de género. Las políticas regresivas impulsadas por el oficialismo, bajo el pretexto de combatir la llamada "agenda woke", resultan en un retroceso en los derechos de las mujeres y personas del colectivo LGBT+, dejando a muchas en situaciones de extrema vulnerabilidad.
Los datos son contundentes y desgarradores: un femicidio ocurre cada 30 horas en el país. A pesar de que el 17% de las víctimas había realizado denuncias previas y el 13% contaba con medidas judiciales de protección, estas herramientas resultaron insuficientes para evitar los asesinatos. Además, al menos 10 femicidas pertenecían a fuerzas de seguridad.
El informe también destaca un preocupante incremento en el uso de armas de fuego y un recrudecimiento de la violencia machista en provincias como Córdoba, Santa Fe y Neuquén, esta última con la tasa más alta del país: 2,71 femicidios cada 100.000 mujeres. En muchos casos, las víctimas convivían con sus agresores debido al deterioro económico, lo que subraya cómo las políticas de ajuste impactan directamente en la vida de las mujeres.