El Gobierno nacional dio el primer paso formal hacia un nuevo aumento de tarifas energéticas que comenzará a regir en enero de 2026. A través de una batería de resoluciones publicadas por la Secretaría de Energía, se fijaron las pautas que derivarán en subas en las boletas de luz y gas, alineadas -según el Ejecutivo- con la inflación y con el nuevo criterio de asignación de subsidios. En los hechos, el ajuste vuelve a trasladarse al bolsillo de los usuarios, mientras se consolida un esquema de quita de ayudas estatales. Entre las nueve resoluciones difundidas se destaca la 605/2025, que determinó un incremento en el Precio de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) del gas natural. Ese movimiento implicará un aumento inicial del 0,53% en las facturas, al que luego se sumarán los ajustes por transporte y distribución.
En los considerandos, el propio Gobierno explicitó la lógica del ajuste: "El ministerio de Economía instruyó a esta Secretaría a continuar para el mes de enero de 2026 con el sendero de actualización de precios y tarifas del sector energético, en un contexto de notoria desaceleración inflacionaria verificada a la fecha, y con el objetivo de mantener dichos precios y tarifas en valores reales lo más constantes posibles".
La frase, repetida como justificación técnica, contrasta con la experiencia cotidiana de los usuarios, que acumulan aumentos mes tras mes. A la suba del gas se suma la Resolución 602/2025, que fijó un nuevo precio spot de $14.381 por MWh en el Mercado Eléctrico Mayorista, impactando directamente en las tarifas eléctricas. A su vez, la Resolución 604/2025 estableció nuevos precios de referencia para el período enero-abril de 2026 y dispuso bonificaciones para usuarios residenciales de niveles 2 y 3, aunque alineadas con las tarifas del nivel 1, el más caro del sistema.
El resultado concreto fue un aumento promedio del 2,5% en las tarifas de luz y gas para enero. Con resoluciones del Ente Nacional Regulador del Gas publicadas en el Boletín Oficial, el Ejecutivo oficializó los nuevos cuadros tarifarios en todo el país. Mediante las resoluciones 1009 y 1012, el organismo aprobó los valores de Metrogas y Naturgy. El cargo fijo del gas en gran parte del AMBA oscilará entre $2.876,99 y $4.058,43 mensuales, lo que implica ajustes del 2,7% para usuarios de Metrogas y del 2,6% para los de Naturgy.
Desde el Gobierno insistieron en el mismo libreto: "Continuar con el sendero de adecuación de precios y tarifas, en un contexto de desaceleración inflacionaria, con el objetivo de mantenerlos en valores reales lo más constantes posible". Sin embargo, la suma de aumentos desmiente la idea de estabilidad para los ingresos populares. En electricidad, la Secretaría de Energía también aplicó una suba en el Precio Estacional de la Energía Eléctrica (PEST). A través de la Resolución 604, el precio mayorista pasará de $60.184 a $62.519 por MWh en hora pico, un ajuste del 3,88% entre enero y abril.
El ajuste no se limita a la energía. El agua potable y el saneamiento cloacal también aumentarán. El Ente Regulador de Agua y Saneamiento restableció el mecanismo de actualización tarifaria aprobado en 2024 y puso fin al tope excepcional del 1% mensual que rigió durante 2025. De este modo, desde enero las boletas de AySA subirán 4% en el AMBA y la tarifa promedio rondará los $25.865. Los nuevos valores implican que los hogares de zonal alto pasarán de pagar $29.317 a $30.489; los de zonal medio, de $26.624 a $27.689; y los de zonal bajo, de $21.393 a $22.248.
El esquema contempla algunos alivios parciales y mantiene beneficios para la Tarifa Social, pero el sendero general es claramente ascendente. En los considerandos de la Resolución 53/2025, el ERAS justificó la medida en una supuesta "diferencia acumulada del 21,05% en los ingresos" de AySA durante el último año, lo que habría significado $95.000 millones no percibidos hasta noviembre. El equilibrio financiero de la empresa vuelve así a apoyarse en el aumento de tarifas, no en una política de inversión estatal.
A este panorama se suma el inminente cambio en el esquema de subsidios a la luz y el gas. El Gobierno publicará un decreto que pondrá en marcha el régimen de Subsidios Energéticos Focalizados (SEF), que dejará sin ayuda a los hogares con ingresos superiores a tres Canastas Básicas Totales. Según el último dato del INDEC, ese umbral equivale a $3.771.987,09 mensuales. Por debajo de ese ingreso, los subsidios se mantendrán, aunque con alcances cada vez más acotados.