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"Intentaron rematarme en el piso": se metió en una fiesta de 15, quiso llevarse los vinos y atacó al padre de la quinceañera

La víctima perdió el 40% del cráneo, quedó sordo de un oído y ciego de un ojo tras el ataque.

17 Junio de 2025 13:13
"Intentaron rematarme en el piso": se metió en una fiesta de 15, quiso llevarse los vinos y atacó al padre de la quinceañera
Le negó un vino en un cumpleaños y casi lo mata

Lo que debía ser una noche de alegría familiar y música terminó convertido en una escena de horror y violencia desmedida. El 15 de noviembre de 2021, en el barrio La Herradura de Mar del Plata, Diego Vega celebraba los 15 años de su hija cuando fue brutalmente atacado por un vecino con un caño metálico. El motivo: haberse negado a entregar una botella de vino a un grupo que irrumpió sin invitación. Este lunes, casi tres años después, el Tribunal Oral Federal N.º 1 de Mar del Plata condenó a Diego Sebastián Paredes, de 37 años, a nueve años de prisión por el delito de homicidio en grado de tentativa. 

El fallo, que descartó el agravante de alevosía pedido por la fiscalía, reconoció sin embargo la violencia del hecho y sus devastadoras consecuencias para la víctima. Según reconstruyó el diario La Capital, todo comenzó cuando un grupo de vecinos, entre ellos Paredes, intentó sumarse a la fiesta familiar sin haber sido invitados. No solo quisieron colarse, sino también llevarse algunos vinos para beber en la calle. La negativa de Diego Vega desató una secuencia inesperada y brutal. Tras una feroz discusión, Paredes lo atacó por la espalda con un caño galvanizado, sin darle oportunidad de defensa.

El impacto fue tan feroz que Vega perdió el conocimiento, se desmayó en al menos cuatro ocasiones y debió ser trasladado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA), donde permaneció 27 días en terapia intensiva. "Creo que intentaron rematarme en el piso", relató durante el juicio, conmoviendo a la sala al enumerar las secuelas que arrastra hasta hoy: perdió el 40% del cráneo, es sordo de un oído y ciego de un ojo. Además, debió abandonar su trabajo y atravesar más de un año de rehabilitación.

La defensa de Paredes había solicitado su absolución y que el hecho fuera recaratulado como lesiones graves, lo que habría implicado una pena excarcelable. Alegó que la autoría no estaba probada con contundencia. Pero los jueces Paula Soulé, Juan Facundo Gómez y Pablo Javier Viñas desestimaron ese planteo, aunque señalaron que no hubo alevosía, ya que Vega estaba en "estado de alerta" ante una posible pelea. El fiscal Carlos Russo había pedido una pena de 17 años, remarcando "la gravedad de las lesiones y las secuelas vitales que padece la víctima".

Cata de vinos

Mientras Paredes comienza a cumplir su condena, Vega sigue luchando día a día con un cuerpo dañado y una vida partida en dos. El afectado recalcó que estuvo internado poco menos de un mes en terapia intensiva, atravesó un año y tres meses de rehabilitación, debió cambiar de trabajo y reiteró las secuelas graves que padece.