La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, volvió a apuntar directamente contra el gobernador bonaerense Axel Kicillof tras los gravísimos incidentes ocurridos en el estadio de Independiente durante el partido por la Copa Sudamericana frente a Universidad de Chile. La funcionaria habló de una "tragedia" y acusó a la Provincia de Buenos Aires de haber "dejado que la violencia se adueñe de la cancha".
En una publicación en sus redes sociales, Bullrich lanzó un mensaje cargado de dureza contra la administración bonaerense: "Lo de ayer en Independiente fue una tragedia. El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires dejó que la violencia se adueñe de la cancha porque les da miedo hacer intervenir a la Policía para recuperar el orden. Se olvidaron de cuidar a las familias y a los hinchas de bien. Conviven con los barras y sus negocios, igual que antes festejaban y trabajaban con los grupos piqueteros que llevaron a la Argentina al desorden". La ministra no se privó de apuntar directamente contra el gobernador: "El inútil de Kicillof se saca fotos con Tapia para la vuelta de las dos hinchadas por puro show electoral, pero es evidente que no puede garantizar la seguridad ni cuidar a la gente".
Junto a su descargo personal, Bullrich difundió un extenso comunicado en el que el Ministerio de Seguridad de la Nación fijó su postura oficial sobre los hechos. Allí se atribuyó la responsabilidad primaria a las autoridades bonaerenses, señalando que "el operativo de seguridad es siempre jurisdiccional y, en este caso, estuvo bajo la responsabilidad de la Provincia de Buenos Aires. La Policía Bonaerense y la Aprevide condujeron un dispositivo con fallas graves: ingreso violento de la barra visitante, destrozos, proyectiles, deficiencias en las requisas y desoír la recomendación de Conmebol de instalar redes de contención".
El documento agrega que "la Policía recibió la orden de no intervenir desde antes del inicio del partido, lo que prolongó la violencia sin control y dejó una tragedia". En contrapartida, el ministerio resaltó la actuación de las fuerzas federales: la Gendarmería requisó los micros de la barra visitante en el ingreso al país, el programa Tribuna Segura controló a más de 25.000 asistentes en el estadio y se impidió el ingreso de Juan "El Gordo Juani" Lenzicki, jefe de la barra de Independiente con restricción vigente. El comunicado incluyó una serie de reclamos concretos: actuaciones inmediatas de la Aprevide y del Ministerio de Seguridad bonaerense.
También se pidió la identificación y sanción de los violentos de ambas parcialidades, derecho de admisión de por vida en todos los estadios, entrega urgente de las cámaras de seguridad y sanciones ejemplares de Conmebol al club visitante. También se adelantó un pedido formal a Migraciones para la expulsión y prohibición de reingreso al país de los hinchas chilenos involucrados en la violencia, además de un operativo conjunto con Gendarmería y la Oficina de Inteligencia de Chile para identificarlos en frontera.
El comunicado sentenció: "Lo ocurrido es uno de los episodios más graves en la historia del fútbol argentino y deja expuesta la total incompetencia de la Aprevide y del Ministerio de Seguridad bonaerense, que por acción u omisión consolidaron un esquema de 'hinchadas unidas' y 'dejar hacer' que agrava la violencia. El orden y la seguridad de los argentinos no puede quedar subordinada a la especulación política ni a intereses electorales. Las familias y los hinchas de bien merecen eventos deportivos en paz".