Lo que prometía ser una jornada de fervor político terminó en un escándalo de proporciones épicas. Javier Milei, tuvo que abandonar su caravana en Lomas de Zamora después de que vecinos enfurecidos desataran un violento ataque a piedrazos contra el vehículo que lo trasladaba.
La escena, digna de una película de acción, incluyó insultos, caos y hasta la fuga improvisada del diputado y candidato José Luis Espert en moto, dejando atrás lo que parecía una batalla campal.
El líder libertario había llegado al centro del municipio bonaerense con la intención de realizar un acto de campaña en la plaza principal, acompañado por su hermana Karina Milei y otros referentes del espacio político. Sin embargo, lo que comenzó con cantos y aplausos por parte de sus seguidores rápidamente se transformó en un clima hostil.
En cuestión de minutos, un grupo de manifestantes comenzó a arrojar piedras y botellas contra la camioneta blanca que transportaba al mandatario, obligando a su equipo de seguridad a evacuarlo de urgencia.
"De repente volaron piedras, la gente empezó a gritar y se generó un momento de mucho descontrol", relató un testigo que presenció el momento. La situación escaló tan rápido que Espert, en una maniobra que no pasó desapercibida, optó por abandonar el lugar en una moto, dejando atrás el desastre.
Desde el oficialismo libertario, las acusaciones fueron directas: militantes kirchneristas habrían sido los responsables del ataque. Sin embargo, sectores opositores minimizaron los hechos y señalaron que el Gobierno busca victimizarse para desviar la atención de los escándalos que lo rodean, como las denuncias por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS).
Milei, lejos de calmar las aguas, aprovechó el episodio para cargar nuevamente contra Diego Spagnuolo, ex titular de la ANDIS, prometiendo llevarlo a la Justicia por "mentir descaradamente". En medio del caos y las acusaciones cruzadas, el acto en Lomas de Zamora quedó suspendido y la caravana libertaria terminó siendo un símbolo del descontrol político que atraviesa la recta final de la campaña.
La imagen del presidente Javier Milei huyendo bajo una lluvia de piedras y su aliado escapando en moto será difícil de borrar. Lo que debía ser un despliegue de poder terminó siendo una escena bochornosa que deja más preguntas que respuestas sobre el futuro político del oficialismo libertario.