La política argentina sigue sumando capítulos inesperados, y el más reciente tiene como protagonistas a Karina "El Jefe" Milei, Cristian Ritondo y Diego Santilli. En un giro que pocos habrían anticipado hace unos meses, representantes del PRO parecen estar dispuestos a agachar la cabeza y buscar acuerdos con La Libertad Avanza (LLA) para intentar arrebatarle la gobernación bonaerense al peronismo liderado por Axel Kicillof.
El encuentro, que tendrá lugar este lunes en Casa Rosada, marca el inicio de negociaciones que podrían determinar el futuro político de la Provincia de Buenos Aires. Para el PRO, esta reunión llega en un momento delicado. Después de semanas de tensiones y desplantes públicos entre Javier Milei y figuras clave del espacio amarillo, como con Jorge Macri en el tradicional tedéum, el partido liderado por Mauricio Macri parece estar cediendo terreno.

Los hermanos Milei, con su estilo confrontativo y su retórica incendiaria, hicieron temblar los cimientos del partido amarillo dejándolo en un humillante tercer lugar en las elecciones legislativas de CABA. Ahora, el PRO busca un salvavidas en una alianza que, aunque incómoda, podría ser su única carta para evitar una nueva derrota frente al kirchnerismo en la provincia más importante del país.
Sin embargo, no todo es tan simple: Ritondo ya se encargó de dejar clarito su rechazo a los "pases" de dirigentes entre espacios, lo que podría complicar la integración de figuras del PRO en las listas de LLA. Aun así, las conversaciones avanzan bajo un objetivo común: derrotar al oficialismo provincial y nacional, o en palabras de Milei: "Ponerle el último clavo al cajón del kirchnerismo".
La clave de este posible frente común radica en la intención de sumar fuerzas para enfrentar al kirchnerismo en su bastión más sólido. La Provincia de Buenos Aires representa no solo un territorio estratégico por su peso electoral, sino también un símbolo del poder peronista. Para Karina y Sebastián Pareja, armador de LLA en la provincia, el desafío es consolidar un espacio que pueda captar el descontento de los bonaerenses con la gestión de Kicillof a como dé lugar.
Por parte del PRO, Santilli y Ritondo parecen estar dispuestos a negociar, aunque esto implique ceder protagonismo a los libertarios. Esto refleja una desesperada necesidad electoral y claro, un reconocimiento tácito del crecimiento de LLA como una fuerza política capaz de disputar poder real en la provincia.
El Congreso libertario: segundo round
Mientras las negociaciones avanzan, LLA sigue fortaleciendo su estructura en territorio bonaerense. Se supo que el equipo de Karina restableció la organización del Congreso libertario, un evento que busca profundizar la presencia del espacio en la provincia que había sido postergado por la muerte del Papa Francisco; ahora, se reprogramó para realizarse en La Plata antes del 9 de julio, día límite para el cierre de alianzas.
Con toda la fuerza, prometen que el evento reunirá a más de 1.200 personas en el salón Vonharv. Este evento libertario es la única oportunidad para escuchar las demandas de los bonaerenses y también para delinear un programa político a largo plazo y evaluar posibles candidatos para las elecciones provinciales pero también con vistas a 2027.
En paralelo, los libertarios realizaron una encuesta a más de 22.000 residentes del Gran Buenos Aires y del interior provincial para identificar las principales preocupaciones de los ciudadanos. Con estos datos, organizaron ocho mesas temáticas que estarán moderadas por representantes del espacio y especialistas en cada área.
Sin embargo, las miradas están puestas en la reunión entre la esotérica Karina Milei y los líderes del PRO que dejaron en evidencia que el PRO optó por ceder espacio ante el avance imparable de Javier Milei. Una decisión que no deja de ser paradójica para un partido que alguna vez se posicionó como la principal alternativa al kirchnerismo. ¿Y Mauricio Macri? Ese es otro cantar: por ahora disfruta unas placenteras vacaciones por Europa.