El universo mediático que rodea a Wanda Nara nunca descansa. Esta vez, el foco se posó sobre su flamante pareja, Martín Migueles, luego de que salieran a la luz supuestos chats en los que el empresario habría intentado reencontrarse con su ex, la modelo Claudia Ciardone. El material, dado a conocer en SQP, ciclo que conduce Yanina Latorre por América TV, encendió las alarmas, agitó las redes y provocó una reacción inmediata de la conductora.
La bomba explotó durante la última emisión de Sálvese quien pueda, donde Sabrina Rojas mostró en pantalla los supuestos mensajes que Migueles le habría enviado a Ciardone a comienzos de diciembre, cuando ya estaba en pareja con Wanda. La conversación fue aportada por la propia modelo, quien decidió exponerla en el ciclo que conduce Latorre. "¿Querés verme? ¿Podés? Quiero verte", insistió Migueles en el chat que rápidamente se viralizó. Del otro lado, Ciardone marcó un límite tajante: "Estás loco Martín, vos estás re expuesto, primero esto te lo doy como consejo, Wanda está hoy en una vidriera, aunque vos me digas que no sos conocido, ella sí. No tiene sentido arriesgar". Lejos de frenar, la respuesta del empresario habría sido aún más directa: una dirección y un pedido casi suplicante: "Tomemos un café, por favor".
La modelo, que hoy está en pareja, aclaró que nunca aceptó el encuentro. "Si me gustó hablar con vos y que queden las cosas bien porque no estaba bueno que quede todo mal", respondió, intentando cerrar el intercambio sin escalar el conflicto. Sin embargo, la sola existencia de los mensajes alcanzó para detonar el escándalo. El panel televisivo no tardó en recordar el pasado sentimental de Migueles y su breve pero conflictiva relación con Ciardone, que habría terminado mal cuando ella descubrió que no eran "exclusivos" y que él se veía con otras mujeres del mismo gimnasio de Nordelta.
Ese antecedente fue clave para entender por qué la modelo decidió no callarse esta vez. En diálogo con el programa, Ciardone fue contundente: "Fue extraño que me vuelva a escribir. No era necesario porque no hablé con él nunca más, desde junio de 2023". Y agregó: "Me escribió dos veces. Me mandó mensajes los primeros días de diciembre y después me llamó. Me insistió para verme, obviamente no era para tomar un café porque sé cómo habla él. Yo le dije que no porque estaba en pareja". La vedette fue aún más dura al aire: "Martín Migueles es mentiroso y mujeriego, en ese orden".
Y remató con una frase que resonó fuerte: "Wanda es la engañada". Desde el panel, Yanina Latorre también lanzó munición pesada: "Migueles le está escribiendo y mandando audios, no sexuales, para tomarse un café, a una ex novia". Mientras tanto, Wanda había intentado desactivar versiones previas que hablaban de llanto o ultimátums privados, negándolas en redes sociales. Pero tras la exposición de los chats, hubo un gesto que no pasó desapercibido: esa misma noche borró todas las fotos que había subido con Migueles y dejó de seguirlo en Instagram. Un unfollow que, en el lenguaje del espectáculo, suele decir más que mil comunicados.
El detalle que terminó de avivar el fuego llegó con un horario explosivo: según contaron en el programa, uno de los mensajes fue enviado a las 15.59, "mientras Wanda graba MasterChef". Un dato que sumó dramatismo y rating a la historia. Por ahora, Martín Migueles guarda silencio y no hizo declaraciones sobre la veracidad de las capturas. Wanda, fiel a su estilo, eligió mostrarse firme y seguir compartiendo escenas de su vida cotidiana, incluso imágenes familiares, sin profundizar en el escándalo.