La disputa judicial entre Fabiola Yáñez y el ex presidente Alberto Fernández volvió a los medios de comunicación después de que ambos brinden entrevistas y el escándalo parece irreversible. La actriz y periodista, madre de Francisco, hijo del ex mandatario, habló con Infobae sobre las acusaciones de violencia de género, la revinculación de su hijo con su padre y las declaraciones recientes del ex jefe de Estado en Blender.
Yáñez llegó a Buenos Aires desde España en medio de un contexto que describe como "adverso" según relató y explicó que esperaba contar con el apoyo del padre de su hijo para garantizarle un techo y estabilidad pero todo fue al revés: "Su padre, sabiendo que en determinado momento no íbamos a tener más un techo, tampoco pagó los pasajes para que su hijo estuviera acá", denunció.
La actriz también cuestionó la rapidez y el procedimiento con el que se implementó el régimen de revinculación entre Francisco y Fernández: "Se apresuraron a hacer un régimen de visitas que excede primero el fuero en el que está, vulnerando los derechos del bienestar de Francisco".
El retorno a Argentina no fue sencillo para Yáñez y, ante la pregunta sobre dónde se instaló al llegar al país, respondió: "Fuimos a un Airbnb. El padre estuvo informado desde el primer momento cuál era el domicilio en donde estaba su hijo y hasta qué momento íbamos a estar ahí. Jamás tomaron cartas en el asunto. El padre se hizo el desentendido". Según Yáñez, la falta de apoyo por parte de Fernández es una constante: "Nunca proveyó un techo para su hijo y es hasta el día de hoy que creo que su intención es sacarme a mi hijo".
La periodista aseguró que Fernández busca quitarle la tenencia de Francisco y lo atribuye a una estrategia basada en cuestionar su salud mental: "Él quiere demostrar que yo no puedo ser madre", afirmó. Yáñez sostiene que esta táctica no es nueva y forma parte de una dinámica histórica para desacreditar a las mujeres: "Eso es un argumento del año 1500. ¿Qué hacían los hombres cuando no se podían deshacer de una mujer? 'Tenés problemas mentales, te encierro'. Ahora, en un lugar de tanto poder como es el que tiene un presidente con toda una comitiva atrás, lo lleva a testificar delante de un escribano".
El regreso al país, según ella, también le provocó una sensación de inseguridad constante: "Hoy me siento mucho más vulnerable que nunca", declaró Yáñez, quien asegura que Fernández utiliza su influencia para llevar las causas judiciales a terrenos favorables para él. Además, denunció la falta de custodia tanto para ella como para su hijo: "Han dicho que tengo custodia. Yo no tengo custodia. Y mi hijo tampoco tiene custodia", explicó.
El pasado domingo, Fernández rompió el silencio y negó haber ejercido violencia física contra Yáñez y afirmó que ella había sido manipulada. "Jamás golpeé a Fabiola", sostuvo el ex mandatario. Ante estas palabras, Yáñez respondió con contundencia: "Como las tantas cosas que siempre dijo, que nunca hizo y que realmente después todo el mundo se dio cuenta de que había hecho".
Además, calificó las declaraciones de Fernández como propias de un manipulador: "Si él está hablando de condiciones, me parece que tendría que tener esa conversación con alguien que realmente sepa del tema y le va a decir que en esas tres frases hay tres patologías mínimamente que él tiene".
Fabiola también se refirió al primer encuentro entre Francisco y su padre tras un año y medio sin contacto. Según relató, fue una experiencia apresurada y poco cuidadosa: "No les importaba dónde estuviera viviendo Francisco, no les importaba cómo habíamos llegado. Tan solo me hicieron ir a un lugar donde estaba él, nuevamente a exponerme". La ex primera dama lamentó la falta de precauciones en el proceso de revinculación: "Me parece que una revinculación de un padre que pasa un año y medio sin ver a su hijo debería tener mucho más cuidado".
En medio de la disputa judicial y mediática, Fabiola Yáñez expresó su preocupación por el impacto emocional que esta situación puede tener en su hijo: "La revinculación se ha hecho muy apresurada, vulnerando todos los derechos que yo puedo tener como madre, pero sobre todo vulnerando los derechos del bienestar de Francisco", denunció. Además, cuestionó la falta de empatía por parte del ex presidente: "Está tratando de vulnerarme todo el tiempo, de atacarme para poder decir que mis capacidades para maternar no son las que deberían ser".