Justicia
14 Junio de 2024 13:05
Pablo Ariel Santillán tenía 28 años, era oriundo del partido bonaerense de Merlo y hace pocos días había tomado la decisión de mudarse junto a su novia para comenzar un nuevo proyecto de vida.
El jueves al mediodía, se encontraba circulando por el Camino del Buen Ayre en búsqueda de unos repuestos para llevarle a su mejor amigo, pero tuvo la desgracia de toparse con Carlos Andrés Dip que, por manejar alcoholizado mientras manejaba su auto, lo chocó y causó su muerte.
Minutos antes de las 13:30 horas, Santillán circulaba con su moto por el Camino del Buen Ayre de camino a la Panamericana en el carril donde transitan los de mayor velocidad. A su derecha se encontraba Carlos Dip en su Renault Stepway que terminó perdiendo el control de su vehículo, se cruzó, maniobró e impactó contra una camioneta Peugeot Partner que embistió al motociclista.
El impacto hacia el motociclista fue tal, que el cuerpo salió despedido, voló por el guardarraíl y cayó en la Autopista pero en sentido contrario, donde fue atropellado por un Toyota Corolla, que no llegó a frenar a tiempo para esquivarlo. Minutos más tarde, el Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) arribó al lugar de los hechos y confirmó que Santillán yacía sin signos vitales.
Pero ¿quién era Pablo?
Según pudieron confirmar los allegados de la víctima, Pablo Ariel tenía 28 años y era "el más santo del barrio". Era hijo único y hace pocos días había decidido dejar de vivir con sus padres para mudarse de Merlo a San Antonio de Padua para convivir con su novia.
Federico, uno de los vecinos de su dirección de origen, lo describió: "Era un chico muy familiero y amiguero, que no le faltaba el respeto a nadie". En esa misma línea, aseguró: "Éramos muy compañeros, desde chiquitos que nos juntábamos a jugar a la pelota" y sobre el accidente, indicó: "La verdad que fue una injusticia de la vida que esto sea así, que en cuestión de segundos se va. Es lamentable que el del choche sigue vivo y a mi amigo lo tengamos en una caja".
"Algunos vecinos recién se están enterando, estamos en shock. Yo llegué de laburar y no lo podía creer. La madre en este momento está muerta, no quiere saber nada más nada", confesó. Por su parte, Aldana, también vecina de la zona, expresó: "Era el más santo del barrio, nadie lo podía creer".
En esa misma línea, Ezequiel, uno de los mejores amigos de la víctima y que fue testigo de que Pablo Ariel se había ido a buscar repuestos para ayudar a su amigo, detalló: "Él era muy fanático de las motos, ya desde chico armaba bicicletas con motor y a los 20 ya andaba en su moto".
Luego del accidente, la Policía arrestó y trasladó al culpable a la Comisaría Segunda de Ituzaingó donde quedó detenido y acusado de homicidio culposo, bajo una causa a cargo del fiscal Marcelo Tavolaro de la UFI Descentralizada N°1 de la misma zona. Además, se confirmó que Dip manejaba con 1.97 gramos de alcohol en sangre.
Por su parte, el abogado defensor de Dip, confirmó que el viernes por la mañana se realizará la indagatoria en la Fiscalía 1 de Ituzaingó, donde se podrá comprobar si es verídico que su cliente manejaba alcoholizado en el momento de los hechos. Asimismo, declaró: "Si me confirman que estaba alcoholizado, voy a dejar el caso".
Al ser consultado sobre por qué tomó la decisión de defenderlo, contestó que lo hizo porque es familiar de un conocido, pero que no tendría problema en dejar el caso si se comprueba el alcohol en sangre. De esa manera, subrayó que el fiscal no le dio permiso para hablar con el detenido, pero que le había llegado la información de que Carlos Dip había tenía un problema de salud previo a chocar y por eso se produjo el accidente. "Si se comprueba que fue así, seguiré en la causa", declaró.
