Internas expuestas
07 Mayo de 2025 09:01
Tras semanas de maniobras cruzadas, el Senado de la Nación volverá a sesionar este miércoles a las 11:30 con un temario cargado de tensión política. La sesión pondrá fin a la novela otoñal que protagonizaron La Libertad Avanza (LLA), el PRO y el resto del arco legislativo, con el proyecto de Ficha Limpia como eje de una trama que expuso internas oficialistas, estrategias cruzadas y rivalidades de campaña. El temario fue definido el pasado 22 de abril en la reunión de Labor Parlamentaria y se mantuvo intacto, incluyendo los pliegos diplomáticos de Alejandro Oxenford (EE.UU.) y Wenceslao Bunge Saravia (España), la designación de Emilio Viramonte en la Secretaría Administrativa, una serie de tratados internacionales y un proyecto de emergencia para Bahía Blanca y Coronel Rosales impulsado por los senadores bonaerenses.
Pero todas las miradas están puestas en la Ficha Limpia, que regresa al recinto luego de casi tres meses de idas y vueltas, utilizada como ficha de presión y especulación tanto por el oficialismo como por sus socios de coyuntura. La discusión por la Ficha Limpia -proyecto que busca impedir que personas condenadas en segunda instancia accedan a cargos electivos- fue utilizada como herramienta de presión política. En el caso de LLA, para incomodar al kirchnerismo y, en particular, a Cristina Fernández de Kirchner, que enfrenta una condena en segunda instancia en la causa Vialidad. Sin embargo, el intento por desestabilizar al kirchnerismo se diluyó entre otras derrotas del Gobierno en el Congreso, como la caída de los pliegos para la Corte Suprema de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla y el escándalo del Criptogate en Diputados.
El PRO, por su parte, buscó capitalizar el proyecto como bandera de campaña para su candidata en CABA, Silvia Lospennato, impulsora histórica de la iniciativa y rival interna del vocero presidencial Manuel Adorni. Fue precisamente esta competencia porteña la que embarró aún más el juego legislativo: los libertarios se resistieron durante semanas a darle a Lospennato la "foto del triunfo", temiendo fortalecerla políticamente a costa de su propio vocero en la Ciudad.
La tensión alcanzó su punto más evidente aquel mismo 22 de abril, cuando el jefe del bloque libertario, Ezequiel Atauche, pidió dejar a Ficha Limpia fuera del temario de la sesión de homenaje al papa Francisco. En una admisión poco habitual, Atauche confesó ante senadores dialoguistas que el Ejecutivo no quería tratar el proyecto esa semana ni el 7 de mayo, dejando perplejos a los presentes.
El Gobierno también ensayó otras estrategias, como responsabilizar a los senadores santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano por el fracaso de una sesión especial que había sido convocada para el 9 de abril. Sin embargo, Carambia desmintió la versión con un video donde reveló que fue el propio José Rolandi, un hombre del Ejecutivo, quien había maniobrado en contra del proyecto.
El poroteo previo a la sesión arroja 38 votos afirmativos, una cifra que alcanzaría para aprobar la ley con lo justo, superando el bloque kirchnerista de 34 bancas. Aun así, las aguas siguen agitadas: algunos sectores dentro del Gobierno promueven introducir modificaciones para retrasar la sanción definitiva, lo que obligaría a devolver el proyecto a Diputados. Esta jugada evitaría que el PRO celebre un triunfo legislativo justo antes de las elecciones porteñas del 18 de mayo.
En Balcarce 50 hay versiones contrapuestas. Mientras un sector asegura que "los votos están" y que no se hará nada contra el proyecto enviado por el Ejecutivo, otros advierten que aún faltan al menos cinco voluntades clave del interior para llegar al número necesario. Las dudas crecen en un clima de suspicacia hacia el PRO, al que acusan de buscar capitalizar tanto la aprobación como el fracaso del proyecto para potenciar la figura de Lospennato.
La votación por Ficha Limpia también se da en un contexto de fractura y realineamiento dentro de la oposición. Patricia Bullrich formalizó su afiliación a La Libertad Avanza, en un acto en la plaza Vicente López junto a Adorni y Karina Milei, marcando su ruptura definitiva con el PRO. El gesto se enmarcó en una serie de movimientos que reflejan el avance libertario sobre los escombros del espacio que fundó Mauricio Macri.
Cristian Ritondo, presidente del PRO bonaerense, también comenzó a tender puentes con el oficialismo al mostrarse con Sebastián Pareja, operador de confianza de Karina Milei, en la antesala de un eventual acuerdo provincial. "Mauricio puede ir mirando a la FIFA, es un lugar atractivo para meterse", ironizó un funcionario libertario, graficando el clima interno con una frase que mezcla ambición, revancha y una certeza compartida: el PRO está en retroceso, y LLA no piensa frenar su expansión.
A horas de la sesión, la votación por Ficha Limpia condensa algo más que una definición legislativa: se convirtió en una batalla por el poder, los liderazgos y el control narrativo de la política nacional. Mientras algunos buscan sacar ventaja, otros intentan contener daños y otros más apuestan a dilatar para debilitar. Lo que está en juego no es solo una ley, sino el tablero completo de una política que se mueve al ritmo de internas, operaciones y elecciones.
