Más
Política
"Miren al norte"

¿Quién mandó a matar a Cristina? La pregunta que ni Capuchetti, ni Milman, ni los Caputo responden

Se cumplen tres años del intento de femimagnicidio.

01 Septiembre de 2025 14:35
Cristina Fernández de Kirchner

El intento de magnicidio contra Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido el 1 de septiembre de 2022, marcó un punto de inflexión en la política argentina. Sin embargo, más de dos años después, las preguntas fundamentales sobre quiénes fueron los autores intelectuales y financieros del atentado siguen sin respuesta. La actuación judicial, encabezada por la jueza María Eugenia Capuchetti, ha sido objeto de críticas por su falta de profundidad, arbitrariedad y decisiones que parecen más orientadas a garantizar la impunidad que a esclarecer los hechos.  

Ahora, la ex presidenta ahora afronta una condena de seis años de prisión domiciliaria y la imposibilidad de ejercer cargos públicos de por vida, demostrando una vez más que el partido judicial juega del lado de los círculos del poder que responden a las grandes corporaciones con jueces como Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi, nombrados por decreto por Mauricio Macri en la Cámara Federal. 

CFK

En su implacable lucha contra los Fondos Buitres, CFK ya había advertido: "Saben que soy infranqueable para que vuelvan a endeudar al país o para que se caiga la reestructuración de la deuda o para que se haga cualquier cosa con los trabajadores. Si me pasa algo, miren al norte", dijo en referencia al gobierno estadounidense del que ahora se aferra Javier Milei en una cruzada totalmente entreguista de la patria con personajes como Peter Lamelas que juró que Cristina "recibiría la justicia que merece". 

La causa que empezó a tramitarse el 26 de junio de 2024 en el Tribunal Oral Federal N°6 tiene en el banquillo de los acusados a Fernando Sabag Montiel, quien disparó; a su pareja, Brenda Uliarte que estuvo en el momento del ataque y a Nicolás Gabriel Carrizo, el presunto organizador de la banda. Sin embargo, los verdaderos pesos pesados como Gerardo Milman y Rossana Pía Caputo no fueron ni siquiera incomodados aunque están verdaderamente implicados tanto en la logística como en el financiamiento del atentado contra la ex presidenta. 

CFK desde el balcón de San José 1111

BigBang propone una línea de tiempo para recordar quién es quién en la causa del intento de femi-magnicidio de CFK. 

La pista del celular de Sabag Montiel 

Una de las controversias más vergonzosas: la destrucción del celular del tirador. Creer o reventar, el teléfono -pieza clave para entender los motivos y conexiones del atacante y que estaba bajo custodia del juzgado de Capuchetti- fue trasladado sin las medidas de seguridad, prendido y en un sobre abierto. Incluso fue un custodio quien contó que durante el traslado, ni siquiera sabía qué estaba llevando. Esto deja en evidencia una negligencia alarmante o, mejor dicho, un acto deliberado para entorpecer la investigación.  

Sabag Montiel

Brenda Uliarte y su tardía detención 

Uliarte, pareja de Sabag Montiel y coautora material del intento de asesinato, pudo haber escapado si no fuera por la acción de un secretario del juzgado que actuó independientemente para detenerla en una estación de tren. Al momento de la detención, la mujer estaba teñida de rubia e intentaba darse a la fuga. A pesar de contar con pruebas claras desde el inicio, Capuchetti demoró en emitir la orden de detención.  

Brenda Uliarte al momento de su tardía detención

La pista Milman: la punta del ovillo

Uno de los episodios más inquietantes fue la declaración de un testigo que aseguró haber escuchado al diputado Gerardo Milman decir: "Cuando la maten, yo voy a estar camino a la costa" dos días antes del atentado. Impunemente, Milman terminó entregando un celular nuevo para ser peritado, un equipo que no estaba en circulación durante el día del atentado a CFK. Paralelamente, los teléfonos de sus asesoras fueron manipulados durante horas en las oficinas de Patricia Bullrich antes de ser entregados. Sin embargo, la jugarreta salió mal aunque Capuchetti no profundizó en esta línea investigativa: "Si vos no nos arreglás la situación, contamos toda la verdad", fue el mensaje que se filtró donde las secretarias advertían a Milman sobre lo que podría llegar a suceder si no apuraba las declaraciones. 

Gerardo Milman junto a Patricia Bullrich

Financiación espuria a través de Caputo Hermanos 

Revolución Federal, una organización ultraviolenta que promovía consignas como "cárcel o bala" para dirigentes kirchneristas durante la pandemia por coronavirus en 2020, fue vinculada directamente con el grupo de "los copitos". Transferencias millonarias provenientes de Caputo Hermanos SA hacia Jonathan Morel, líder de esta agrupación, fueron comprobadas. Cuando prestó declaración Morel, fingió demencia y explicó que el dinero fue para trabajos de carpintería en un local improvisado en Boulogne; también dijo que no era carpintero pero que había aprendido el oficio "a través de videos de Youtube". Creer no reventar, el gerente de compras de Caputo Hermanos declaró que nunca antes había delegado esa tarea y que le resultaba llamativo que Rossana Pía Caputo se encargara personalmente del encargo sin tener experiencia previa en la empresa. Lo que sorprende -o no- es que Capuchetti tampoco avanzó sobre esta línea de investigación. 

Jonathan Morel, líder de la agrupación Revolución Federal

Algo está claro y es que la causa está dividida en mil partes para diluir responsabilidades y garantizar impunidad: en cuanto a la posible financiación de la familia Caputo a Revolución Federal, Capuchetti se lavó las manos y se sacó de encima esa parte de la investigación designando así a otro juez y a otro fiscal; y, aunque ambos se negaron a aceptarla, argumentando que debía investigarse dentro del marco del atentado, la Cámara Federal (not spoiler alert) respaldó la división, lo que fragmentó aún más el proceso y terminó por dificultar la llegada a los autores intelectuales.  

María Eugenia Capuchetti

Así las cosas, se ve a las claras cómo María Eugenia Capuchetti es uno de los principales obstáculos para esclarecer el caso. Ahora, el juicio oral está llegando a su fin y, aunque es probable que se condene a Sabag Montiel y Uliarte como coautores materiales del intento de magnicidio, las preguntas fundamentales siguen sin respuesta: ¿Quién financió el atentado? ¿Qué rol jugaron figuras políticas como Gerardo Milman y Patricia Bullrich? ¿Qué conexiones existen entre Revolución Federal y sectores económicos más importantes de Argentina? y sobre todo... ¿Quién mandó a matar a Cristina Fernández de Kirchner?