La televisión argentina se sacudió con una de las noticias más resonantes del año: Beto Casella dejará Bendita después de casi dos décadas y se mudará a la pantalla de América en 2026. La primicia fue de Ángel de Brito. "Estamos en condiciones de confirmar que Beto Casella el año que viene es figura de América y estará a las 22 con su programa y con casi todo su elenco", anunció en LAM, generando una ola de mensajes en cuestión de minutos.
El conductor de LAM amplió los detalles del pase más comentado del año: "Al final arreglaron lo que tenían que arreglar y el año que viene, a partir de febrero, va a estar pegadito a LAM en América con su programa y casi todos sus compañeros, menos Edith, que se va a quedar en Canal 9 para conducir la nueva versión de Bendita". Según trascendió, Casella se llevará consigo a históricos panelistas como Any Ventura, Alejandra Maglietti y Enzo Aguilar.
Sin embargo, el nuevo ciclo no podrá llamarse Bendita, ya que el nombre pertenece a El Nueve, por lo que el periodista deberá estrenar formato y título. De acuerdo con De Brito, el conductor rescindirá su contrato "en buenos términos", y la despedida definitiva del programa original sería el próximo 20 de diciembre. Pero aunque el pase parecía cerrado y confirmado, el propio Beto decidió ponerle freno al entusiasmo del conductor de LAM.
Visiblemente incómodo con el bombazo que había lanzado el ciclo de América TV, Casella usó los primeros minutos de su programa para desmentir la información y, de paso, marcar territorio. "Me llama medio mundo, móvil y todo. No firmé nada con nadie. Nada, no firmé nada. Así que que esperen a que en todo caso lo diga yo, porque yo que soy el principal interesado", lanzó, contundente, desde el estudio de Canal 9.
Pero De Brito no se quedó callado. Desde su cuenta de X, replicó el clip de Bendita y disparó sin rodeos: "Mentira. Ya rescindió". El ida y vuelta no tardó en convertirse en tendencia en redes, con fanáticos de ambos programas defendiendo a sus conductores. Molesto por lo que consideró una falta de respeto profesional, Casella subió el tono y respondió con un mensaje directo: "Me extraña mucho que gente de la industria no maneje estos códigos. Los traspasos de este tipo están llenos de detalles pequeños, que hay que ir hablando uno a uno. Hay un ciclo que tengo que cuidar hasta fin de año, poniéndole el mismo amor de siempre", escribió.
Y sentenció: "Hay marcas, auspiciantes comprometidos, panelistas involucrados. Estos procesos necesitan discreción, prolijidad, profesionalismo. Y debería ser el propio protagonista quien anuncie las cosas (por respeto a todo lo antes mencionado) en el momento que quiera y de la forma que desee". Detrás de los micrófonos, sin embargo, la tensión entre Casella y El Nueve venía cocinándose hace meses. Diferencias con la dirección del canal y el desgaste natural de casi veinte años al aire habrían acelerado la salida. En paralelo, América -que atraviesa una etapa de renovación de figuras- vio la oportunidad y avanzó con una oferta que Beto no pudo rechazar.
Así, mientras Bendita se prepara para su temporada final con la conducción de Edith Hermida, Beto Casella planea su desembarco en una nueva pantalla y con un formato que promete mantener su sello inconfundible de humor, ironía y crítica televisiva.