Una nueva gala de MasterChef tuvo lugar el pasado miércoles en la pantalla de Telefe. El desafío fue reproducir una cookie XL creada por Damián Betular. En ese contexto, Sofía Gonet —conocida como La Reini— parecía tener cierta ventaja, ya que cuenta con su propia línea de galletitas al estilo estadounidense. Sin embargo, sorprendió con una confesión.
La influencer pasó al frente para presentar su receta y Wanda Nara aprovechó la instancia para consultarle cómo iba su empresa. Fue entonces cuando la participante aclaró: "No es mía, yo hice una colaboración por la que por lo que se vende por mes yo me llevó un pequeño porcentaje", confesó.
Además, en una noche cargada de tensión por conocer quién abandonaría MasterChef, y en un clima de sincericidio, La Reini admitió que nunca en su vida cocinó, sino que solo prestó su imagen. "Ósea que si te hace una mejor oferta la empresa de Betular podés ser la cara de sus cookies", redobló la apuesta Wanda Nara. Y la joven respondió sin dudar: "Me encantaría".
La buena relación entre la Bad Bitch y La Reini es evidente. La empresaria destacó el carisma y la autenticidad de la influencer frente a las cámaras, lo que la llevó a decir: "Si yo tuviera que elegir entre todas las chicas del momento, te veo como sucesora".
Gonet, visiblemente emocionada pero fiel a su estilo despreocupado, respondió entre risas: "Gracias. Ni me importa esto de MasterChef. Yo con esto ya gané". Esa frase marcó un momento clave: para ella, el simple hecho de ser reconocida por Wanda ya era una victoria.
En entrevistas posteriores, La Reini dejó en claro su postura competitiva y su perspectiva sobre el programa: "Chau a la competencia. No me interesa MasterChef. Sigan cocinando". Para ella, el reality no es un fin en sí mismo, sino una plataforma más para mostrarse tal cual es, sin necesidad de pelear por un premio.