Carolina "Pampita" Ardohain atraviesa un momento personal y profesional de renovación. En una entrevista con Puro Show, la modelo y conductora habló sin filtros sobre su presente emocional, su nuevo rol al frente del exitoso programa Los 8 Escalones, y las transformaciones profundas que vivió en el último tiempo. "Le bailo a la vida siempre", dijo, al describir esta etapa marcada por el disfrute, el desapego y una versión más consciente de sí misma. "No me lo esperaba para nada, llamó Guido Kaczka y fue irresistible la propuesta", contó sobre su sorpresiva incorporación al ciclo televisivo que supo liderar Guido.
En su relato, Pampita dejó entrever que esta oportunidad llegó en sintonía con un cambio personal profundo. "Me gusta todo lo que viví todo este año, de reconstruirme, es un año de mucha paz emocional. Tenía esa sensación de abrir los ojos, de no esperar nada, de disfrutar lo más chiquito, cambiar las prioridades y cambiar los sueños. Enfocarme en el amor de familia, hijos y amigos. Uno se va reinventando, mis propias versiones van cambiando", manifestó.
La confesión que más resonó fue una frase potente: "Ya no lloro más por nada". Así resumió la resiliencia que logró tras haber atravesado situaciones difíciles en lo afectivo y en lo personal. "Con todos los dolores que tuve en el alma, yo valoro mucho lo lindo que me pasa. Me pasaron cosas tremendas, no estoy para llorar por cualquier cosa. Sé que la gente espera de mí que me ponga en el rol de víctima, pero no cualquier cosa me derrumba", relató la modelo, más suelta y confiada que nunca.
Durante años, Pampita fue emblema de la mujer enamorada, la pareja soñada, la familia de tapa de revista. Hoy, sin dejar de lado su costado romántico, la conductora reconoció que aprendió a redibujar sus vínculos desde otro lugar: "Siempre tuve mi sueño de la familia y pensaba que era siempre con un compañero al lado, me di cuenta que mi familia son mis hijos. Mis chicos están muy bien, que es lo que me importa. Estamos bien con los que somos, no nos falta nada, nos divertimos, la pasamos bárbaro".
De esta manera, la morocha sostiene que aprendió a estar sola sin que eso signifique vacío o carencia. "No esperar nada también está bueno. Tuve que aprender, tuve que cambiar. No es la presión, yo soy una romántica y me encanta el amor, pero pude empezar a estar bien sola de noche, teniendo mis tiempos. Estar bien con uno mismo, con lo que hay", reflexionó. Y aunque no descarta una nueva historia de amor, deja claro que no está buscando. "Los caballeros averiguan el teléfono y me escriben, pero estoy más selectiva. No sé lo que me depare el destino más adelante. No es algo que estoy buscando, aparece solo".
Al ser consultada sobre los rumores que la vinculaban sentimentalmente con el actor Joaquín Furriel, Pampita fue contundente: "No sé si Furriel está de novio, si vive en Argentina. Cuando lo dijeron, me fui al Instagram a ver si me mandaba un mensaje, y nada. La última vez que lo vi fue hace años en Pampita Online, en una entrevista. No sé de dónde salió eso, no lo tengo en el radar".
También respondió sobre el reciente fin de su relación con Martín Pepa. Aunque la pareja nunca fue pública en sus redes, Pampita eligió hablar con cariño y respeto. "Martín es lo máximo, es un divino total, fue generoso. No había un plan a futuro que alguno de los dos cambie de país. Nunca expuse esta relación en mis redes, cuidé esta parte, lamento que lo estuvieron matando. Todos lo aman, se portó súper bien, me mimó mucho, me cuidó mucho. Somos humanos, a veces funciona y a veces no", cerró.