28 Abril de 2016 13:30

Imaginate los lugares más extraños e impensados. Y después fijate cómo podrías instrumentarlos. Conocés probadores, baños, mesas de cocina, y ya vemos que los transportes públicos no son la mejor opción en tiempos de cámaras por doquier. Existen otras opciones, que te presentamos en esta nota. Eso sí, si es fuera de casa, armate un bolsito con algún kit de higiene. ¡Y vámonos de pic nic!
En el túnel de un lavadero de autos
Si el auto está polarizado, mejor. Si no lo está, la espuma hace las veces de cortina. El sonido del agua, el vapor y todo lo húmedo que los rodea pueden ser excitante. Si no te molestan los asientos, podés disfrutar mucho. Ojo con la palanca de cambios y con presionar la bocina sin querer. Tienen más o menos 25 minutos para los arrumacos hasta salir por el otro extremo, con el auto limpio y una sonrisa de oreja a oreja.
En la rueda de la fortuna
En los parques de diversiones la presencia de público infantil genera pudor, pero con imaginación y discreción todo se consigue. Solitos, sentados en su cabina, pueden hacer sus cositas cuando llegan arriba de todo y disimular mientras van bajando. Eso sí, calculen el tiempo que dura la vuelta. No recomendado para quienes tengan vértigo, pero muy afín para quienes no temen romper tabúes y mandarse en opciones fuera de lo común.
En una casa en venta
Llamen a cualquier inmobiliaria y pidan una entrevista para ver una casa que supuestamente quieren comprar. Algunas -y para las casas vacías- te dan las llaves y te dejan recorrer sin la presencia de vendedores que tratan de que te mudes mañana mismo. Si no se animan también pueden probar con una casa abandonada. Tal vez sea un poco sucio, pero excitante, seguro.
En un teleférico
Otra opción para quienes aman las emociones fuertes y no sufren de vértigo. Buscá algún destino turístico que los incluya, y listo. La única contra es entretenerse con los paisajes, porque si eso pasa tienen que volver otra vez, y otra vez, y otra vez, y puede salir un poco caro... la única contra es que puede haber mucho movimiento, así que hay que estar tranquis. No sean bruscos, es mejor dejar el dominio de la situación a manos y labios. Puede ser muy hot hacerlo con tremendo paisaje y sostenidos en las alturas.