El amanecer en Puerto Madero, habitualmente silencioso y casi ceremonial, quedó marcado este jueves por una imagen que dejó en estado de shock incluso a los primeros efectivos que llegaron al lugar. A las 06.03, dos testigos irrumpieron con un aviso desesperado: habían visto a un hombre arrojarse desde el Puente de la Mujer, hundiéndose en las aguas oscuras del Dique 3 sin dar señas de volver a la superficie. En cuestión de minutos, lo que suele ser un paseo turístico se transformó en un espacio tomado por sirenas, vehículos oficiales y embarcaciones de búsqueda. Prefectura Naval desplegó semirrígidos, nadadores de rescate y buzos especializados, mientras la Policía de la Ciudad y la Policía Federal rodeaban el perímetro intentando reconstruir el inicio de una escena marcada por la urgencia y la incertidumbre.
Los testigos aseguraron que, tras caer, el hombre -de entre 30 y 35 años- llegó a ser visto dentro del agua "en una situación desesperante", pero luego desapareció. Esa fue la última señal antes de que comenzara una búsqueda contrarreloj que se extendió por más de dos horas, con bomberos inspeccionando los bordes del dique y embarcaciones recorriendo el canal en zigzag, mientras buzos se sumergían una y otra vez en un río de visibilidad casi nula.
En el muelle, un indicio inquietante reforzaba la carga dramática de la escena: una camisa roja, un par de zapatillas y medias cuidadosamente apoyadas, presuntamente abandonadas por la víctima antes de saltar al agua. Era lo único que quedaba en tierra mientras el operativo avanzaba. Finalmente, pasadas las 8 de la mañana, Prefectura informó el hallazgo. El cuerpo apareció "entre el segundo y el tercer flotín, desde Costanera hacia Puerto Madero, en el sector central del canal", según detallaron fuentes del operativo. El hombre fue encontrado desnudo, un dato que abre nuevas incógnitas en una investigación que recién comienza.
La Unidad Criminalística Móvil trabajó en la zona recolectando pruebas y analizando la secuencia final de los hechos. Ahora, el caso quedó en manos del fiscal Santiago Vismara, a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 2, con la Secretaría Única de la fiscal Capelletti.