La expresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner (CFK) rompió el silencio esta vez por su cuenta oficial de X y realizó denuncias contundentes, cuestionó la legitimidad del juicio por la causa Cuadernos y aseguró que algunos de los imputados, convertidos en "arrepentidos" bajo el sistema judicial, fueron sometidos a torturas psicológicas y físicas.
"Ya lo habíamos dicho: en esta opereta judicial de los Cuadernos truchos, a los llamados 'arrepentidos' habría que llamarlos 'extorsionados'", afirmó Fernández de Kirchner. Sin embargo, fue más allá: "Y la verdad... nos quedamos cortos. Porque ahora vemos que algunos de estos 'extorsionados', directamente fueron torturados".
La denuncia de la expresidenta se centra en las condiciones inhumanas a las que sometieron a algunos de los acusados para forzarlos a declarar en contra de otros implicados. En su extenso posteo de X contó que uno de los detenidos fue aislado en una celda sin ventanas, bajo un reflector encendido las 24 horas del día, sin contacto humano y siendo filmado constantemente: "Esa combinación de luz perpetua, vigilancia y soledad no es un exceso administrativo: es lo que llaman tortura blanca, diseñada para quebrar la mente sin dejar marcas visibles", explicó.
Desde San José 1111 donde cumple prisión domiciliaria, la ex mandataria también citó el testimonio del abogado Roberto Herrera, quien en una entrevista para TN detalló los tormentos sufridos por uno de sus defendidos: "Cuando él declara como arrepentido, estuvo en un lugar de detención que es Cavia, donde estuvo casi aproximadamente, no sé si estuvo 28 o 30 días, en un lugar donde estaba aislado de todo el mundo con un reflector las 24 horas... y filmándolo las 24 horas, no sabía si era de día, si era de noche, o sea, era un castigo... él entra dentro del sistema de testigo protegido y nosotros no lo podíamos ver", relató Herrera.
CFK expresó su preocupación por éstas prácticas que simbolizan una ruptura profunda con los principios democráticos y los derechos humanos: "Esto ya no es lawfare: es persecución política con métodos propios de las dictaduras. Niveles de coacción contra ciudadanos nunca vistos en democracia", sentenció contundentemente.
Cristina no se olvidó del fiscal Carlos Stornelli, a quien definió como "el que escribió el guion que se está leyendo en este circo y que se reproduce con grandes titulares en Clarín y La Nación es el mismo que extorsionó y llegó a torturar a los acusados para que dijeran lo que él quería como 'arrepentidos'", afirmó.
La jefa del Partido Justicialista recordó además que Stornelli fue procesado anteriormente por asociación ilícita en una causa por extorsión a un empresario y por instalarle una cámara oculta a un abogado defensor: "Eso sí... pese a las pruebas contundentes en su contra, terminó siendo salvado por la Corte de los Tres", agregó en referencia a los jueces de la Suprema Corte Horacio Rosatti (presidente), Carlos Rosenkrantz (vicepresidente) y Ricardo Lorenzetti.
Además, recordó: "Es el Fiscal Carlos Stornelli, el mismo que intentó plantarle cocaína al exmarido de su actual pareja... Parece que el Fiscal no solamente tiene problemas con el Estado de Derecho", dijo la expresidenta y apuntó: "Todo amparado por el bestiario judicial del macrismo: jueces y fiscales al servicio del poder económico, listos siempre para perseguir a la oposición política real y darle impunidad a los delincuentes de verdad", expresó.
Siguiendo esa línea, Fernández de Kirchner vinculó la reapertura de la causa Cuadernos con una estrategia mediática para distraer a la opinión pública: "La reapertura acelerada de los Cuadernos truchos no tiene nada que ver con la Justicia... Es agenda judicial para la distracción: SI NO HAY PAN, QUE HAYA CIRCO", sostuvo.
En su publicación, Cristina Fernández también aprovechó para hablar sobre la situación económica del país abriendo las puertas a críticas por el descalabro económico que viven las clases trabajadoras argentinas: "Te dicen que los precios no suben, pero vos tenés que pagar cada vez más de luz, más de gas, más en transporte, más de alquiler, más de prepaga... y la lista sigue mientras la recesión avanza", señaló.
Además, comparó los índices inflacionarios actuales con los registrados durante su gobierno: "El número de la inflación que ayer dio el INDEC es de 2,3%. No solamente viene creciendo desde hace meses, sino que si la 'anualizás', como hace Milei, es del 27,6%... Más alta que la que dejamos nosotros en el año 2015, la midas como la midas", dijo derribando el mito libertario.
En una posdata cargada de críticas al sistema financiero internacional y su impacto en Argentina, Cristina Fernández de Kirchner apuntó contra el endeudamiento promovido por sectores del gobierno actual: "Bessent ya lo confesó: prestarle a Milei fue un 'gran negocio' para EEUU. No es economía: es colonialismo financiero con cómplices locales", denunció y siguió: "Cuando el Estado se convierte en garante de negocios ajenos, y sus funcionarios en facilitadores de rentas externas; NO ES INVERSIÓN: ES DELITO", concluyó.