Si bien algunos periodistas todavía insisten en defender a Javier Milei cueste lo que cueste, los escándalos que salen a la luz ponen en evidencia la miseria del oficialismo y dejan a más de uno en ridículo. Ese papelón lo protagonizó Mariana Brey, quien en lugar de asumir el silencio libertario, intentó lavarse las manos en vivo.
En A la Barbarossa, analizaban los audios de Diego Spagnulo que destapan un entramado de extorsiones y coimas que salpican directamente al gobierno. Nancy Pazos fue al hueso: "¿Y qué dice el gobierno, Brey?", apuró a su compañera. La periodista, conocida por justificar lo injustificable, quedó titubeando y sin argumentos.
Primero intentó despegarse diciendo que no había hablado con sus "fuentes de confianza" en Casa Rosada: "Si me interesaba saber si hoy Manuel Adorni iba a dar una conferencia y me dijeron que no", respondió, tratando de desviar la atención.
Pazos no la dejó escapar: "¿No los llamaste porque no te dio curiosidad o porque te deprimió todo esto?", retrucó. Brey buscó refugio en una excusa insólita: "No me deprime esto, me deprime la situación que están viviendo los ciudadanos...". Una respuesta que expone la desconexión total de quienes prefieren mirar para otro lado antes que admitir la podredumbre que atraviesa al mileísmo.
Mientras el país se hunde entre el desguace de la educación y la salud pública, los jubilados reprimidos cada miércoles y ahora las coimas que manchan de lleno a Karina Milei, a Brey parece que solo le "toca de cerca" cuando algo le conviene. Esa doble vara terminó siendo fulminada al aire.
Nancy fue letal: "No los llamo, para que me mientan no quiero. Pero vos habitualmente hablás...". Brey quedó contra las cuerdas y, en un giro desesperado, intentó acomodar sus dichos: pasó de decir que no se comunicó, a asegurar que "intentó saber" y que "la mayoría ya se expresó, como en el caso de Lule Menem, en redes sociales". Hasta se animó a remarcar que Milei está "tranquilo" pese a la filtración de audios que exponen la corrupción de su entorno más cercano.
Una defensa torpe y contradictoria, que desnuda lo que muchos periodistas afines al poder libertario prefieren callar: el gobierno se desmorona en un mar de negociados, y el blindaje mediático ya no alcanza para taparlo: "Los sobres les aparecieron a ustedes", dio por finalizada la discusión Nancy Pazos.