El jueves fueron despedidos 140 trabajadores de la sede central. El Gobierno aseguró que el edificio había sido copado por La Cámpora. Sueldos de $60 mil, salmón en el menú y otros lujos de militantes sin formación específica, que les daban órdenes a los ingenieros.
Son empleados calificados con formación universitaria. Cuando llegaron al trabajo en la sede central había una lista en la figuraba quienes podían entrar y quienes no.
Julio Garro se reunió con representantes de los gremios y prometió evaluar la situación de cada trabajador. “Hay predisposición de trabajo conjunto”, afirmó el jefe comunal.
El titular de la Asociación de Personal Legislativo, Norberto Di Próspero dijo que la medida tomada por la vicepresidenta de despedir a más de 2000 empleados “es una barbaridad” y un “gran error”. Habrá medidas de fuerza.
La gobernadora de Santa Cruz anunció por cadena que no sabe cuántos empleados públicos hay, y reveló que el déficit es de más de $4.600 millones. Habrá auditorías y un reordanamiento de las cuentas estilo Macri.
