Las Fuerzas Armadas comandadas por Patricia Bullrich volvieron a tomar las calles aledañas al Congreso para cumplir con el protocolo antipiquetes que cada miércoles se vuelve más violento en las marchas de jubilados. Lo impresionante es que no sólo reprimen con gases pimienta y lacrimógenos a los jubilados sino que ahora también lo hacen contra sacerdotes de la iglesia católica.
Si bien el presidente Javier Milei intenta acercar posiciones, sobre todo desde que asumió la presidencia pidiéndole perdón a Francisco I por hacerlo llamado "el representante del Maligno en la Tierra" y ahora viajará al Vaticano para la asunción del León XIV, en Argentina los golpes contra los curas de opción por los pobres son reprimidos violentamente.

Las imágenes que replican los medios de comunicación son espeluznantes: por un lado, el padre Paco Olveira se enfrenta a Policía Federal Argentina sólo con su sotana y al grito de un Padre Nuestro mientras los efectivos fuertemente armados lo empujan sin piedad.
La situación escaló de manera insospechada cuando los mismos oficiales arrojaron al piso a Olveira e intentaron llevárselo aunque minutos después, al darse cuenta de quién era, lo soltaron. En ese mismo momento, sucedió lo mismo con otro cura, Jorge "Chueco" Romero: la Federal intentó chuparselo pero -después de tirarlo al suelo- lo dejaron libre.
El Congreso permanece completamente vallado y no sólo está la policía Federal sino también la Policía Aeroportuaria que, con sus escudos golpean no sólo a los jubilados sino también a los curas y a manifestantes que acompañan.
Lo irónico es que, según las disposiciones de Bullrich, son los ciudadanos los que no pueden ocupar las calles aunque son los mismos efectivos los que terminan sin dejar espacio en las inmediaciones de la Plaza de los Dos Congresos.
El padre Paco expresó en medio de un tumulto de jubilados que lo acompañaba: "También nosotros como institución religiosa acompañamos a los jubilados como lo hicieron las hinchadas, como lo hicieron las organizaciones sociales" .
El cura villero padre "Chueco" también contó cómo fue el momento en el que fue atacado por el aparato represor de Patricia Bullrich: "Justo fue cuando empezamos a rezar. El padre Paco propuso rezar un Padrenuestro y cuando empezamos a rezar ahí empezaron a empujar. Se ve que no lo quieren a Dios, no quieren a la Virgen, no quieren a su pueblo" .