La impunidad con la que se mueve el gobierno de La Libertad Avanza (LLA) es cada vez más evidente. El candidato a legislador porteño desde el oficialismo nacional, Manuel Adorni, rompió la veda electoral cuando hablaba con la prensa tras emitir su voto. El vocero presidencial se fue sin ningún problema, pero por lo que hizo y de acuerdo a la ley electoral local debería afrontar una multa de entre 146.324 y 438.972 pesos.
"Todo bien, contento. La verdad que increíble votarme a mí mismo, algo que pensé que no iba a pasar nunca", soltó Adorni frente a la rueda de micrófonos que lo asaltaron en la escuela donde sufragó. "Rompiste la veda", le marcó un periodista. "Ah, rompí la veda", reconoció el funcionario nacional.
El evidentemente involuntario paso de comedia que cometió el vocero, llamó la atención por la falta de perspicacia de quien para muchos es un "hábil declarante" en las conferencias de prensa que ofrece desde la Casa Rosada. Las mismas que suspendió y retomó cuando vio que su caudal electoral no crecía. Lo cierto es que el gesto de la falta de lucidez no es lo que más se destaca de lo sucedido, sino la impunidad con la que obró el integrante del denominado círculo de hierro que rodea a la figura presidencial, compuesto además por la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, y el multi asesor Santiago Caputo.
De acuerdo al Código electoral porteño, la sanción por lo que se conoce popularmente como "voto cantado", tiene una multa económica. "Quien adoptare durante los comicios conductas tendientes a violar el secreto del sufragio o revelare su voto al momento de emitirlo, será sancionado/a con multa de doscientas (200) a seiscientas (600) Unidades Fijas (UF) o dos (2) a seis (6) días de trabajo de utilidad pública", establece el artículo 261 de la norma.
El monto de las UF hasta septiembre de 2025 es de 731,62 pesos. Esto significa que el vocero debería pagar entre 146.324 y 438.972 pesos, si la Justicia electoral local decide avanzar en su deber. Los antecedentes de candidatos que cometieron voto cantado existen, aunque no son para nada comunes entre las primeras líneas de la política. El vergonzoso antecedente va en el sentido de la campaña, la cual debió ser apuntalada por el Presidente, a través de la consigna "Adorni es Milei".