14 Mayo de 2015 20:11
“Si nos cagan otra vez, de acá no se ba nadie”, decía una bandera que se encontraba en el alambrado y tal vez indique que todo lo que sucedió estaba planificado. Hasta un drone, vestido de fantasma con un letra B, se paseó por todo el estadio. Parecía una pesadilla, nunca vista, en un espectáculo de este nivel.
Tras jugarse un primer tiempo, aburrido, en el que Boca estuvo lejos de convertirle un gol a River, el caos llegó con el reingreso al campo de los dos equipos. Cuando los jugadores de River salían por la manga fueron agredidos con gas pimienta por parte de hinchas de Boca que estaban, entre el alambrado y la manga de ingreso al campo. Este sería el momento de la agresión:
La televisión registró el momento en que se habría producido la agresión, desde la platea de socios de Boca.
Este incidente retrasó el comienzo del segundo tiempo, provocando ceguera parcial y malestar en el rostro de los jugadores millonarios.
“Lo tienen que suspender...”, le dijeron los jugadores millonarios al árbitro Darío Herrera. A su vez, Marcelo Gallardo, expresó: “Que abran la manga para hacer lo que hicieron, es una vergüenza. Miren cómo están los jugadores”.
Lionel Vangioni, Leonardo Ponzio, Sebastián Driussi, Gabriel Funes Mori y Matías Kranevitter, fueron los más castigados por el gas pimienta. Argento, médico del controlo antidoping, constató que los jugadores tenían excoriaciones y quemaduras de primer grado provocadas por el producto tóxico.
Roger Bello, veedor de la Conmebol, decidió suspender el partido tras más de una hora sin resolución. “Es vergonzoso y lamentable lo que pasó. Esperamos una hora y pico para que tomen esta decisión”, agregó Gallardo que luego se enojó con Arruabarrena por haber dejado a sus jugadores en el campo.
Se espera una decisión de la Conmbebol sobre si el partido continuará o si habrá una sanción para Boca dando por terminado el encuentro. Se decidirá en las próximas horas.
Así quedó la espalda de Ponzio, uno de los jugadores más afectados:
