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6 consejos para elegir el mejor lubricante vaginal

La vieja creencia de que que los lubricantes son para el sexo anal o para la menopausia, ha quedado en el destierro. Lejos de ello, el pomito en la mesita de luz puede mejorar muchísimo encuentros sexuales.

02 Agosto de 2016 06:15
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Un alto porcentaje de mujeres no produce suficiente lubricante natural. En estos casos, el lubricante químico se convierte en un gran aliado. El secreto está en saber que hay varios productos disponibles en el mercado, evaluar sus propiedades y elegir el que mejor va con vos.  

Los beneficios de la lubricación.

Los beneficios de la lubricación.

Esta elección no debe estar basada en atractivos visuales ni en lo que esté de moda. De hecho, los distintos tipos de lubricantes se pueden adaptar a diferentes situaciones y mujeres. En general, los especialistas recomiendan estos productos a las damas que están en la menopausia y tienen las molestias propias de los cambios hormonales y la disminución de los estrógenos, que producen sequedad vaginal. Por el contrario, las más jóvenes no suelen tener estas molestias. Sin embargo, estas podrían necesitar lubricantes para facilitar el sexo con el uso de preservativos, o bien para potenciar el placer. Eso sí, el lubricante apropiado para unas no siempre es el mismo que para las otras.

Placer con lubricante, es muy buena opción.

Placer con lubricante, una muy buena opción.

¿Qué pasa cuando usás el lubricante que no es para vos? Puede producir reacciones no esperadas, como resequedad, infecciones, roturas del preservativo, dificultad para lograr un embarazo y reacciones alérgicas, entre otras. Aprendé a leer las etiquetas de los productos y explorá el tema con tu médico. Dejá la vergüenza y consultale cualquier duda, pues el sexo es salud y existen varios complementos que te pueden ayudar a practicarlo con plenitud.

Elegir lubricante y... ¡gozar!

Elegir lubricante y... ¡a gozar!

Tomá nota de estos consejos y andá tras un placer sano y seguro:

#1: No compres lo que te venden: 

Tus órganos genitales requieren un cuidado especial. No uses cualquier cosa disponible en el mercado. Consultá antes con tu médico.

Ojo con lo que comprás.

Ojo con lo que comprás.

#2: Cuando sos joven, también sirven: 

Usar lubricantes puede ayudarte a combatir la resequedad vaginal propia de algunas etapas como la lactancia, o producto de algún medicamento que tenga este efecto secundario (como los anticonceptivos). También sirven para evitar que se rompa el preservativo, aunque no tengas problemas de sequedad vaginal.

#3: Cuando estas empezando la menopausia: 

Usalos a full. Lo mejor son los hidratantes vaginales para utilizar de manera regular, y lubricantes durante el acto sexual.

¡Plenitud toda la vida!

#4: Mejor los que son base de agua:

Son seguros, se pueden lavar fácilmente y son compatibles con productos de látex (como los preservativos u otros accesorios). Usualmente son más baratos y menos agresivos con tus genitales. Sin embargo, por ser de agua precisamente, se evaporan rápido ante la fricción y es posible que debas reaplicar varias veces.

#5: Ojo con los fabricados a base de aceites y derivados del petróleo:

Sucede lo mismo que con la vaselina. Estos productos pueden romper el preservativo y alterar el pH de la vagina, lo que puede causar infecciones. Además, no son recomendables para juguetes, y no están para nada recomendados para sexo oral.

#6. Ojo con las reacciones alérgicas:

La primera vez que uses uno, probalo antes en una pequeña zona que hayas lavado y esperá un rato, para chequear que no te provoque ardor ni irritación.

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