03 Octubre de 2016 14:39
Estaba en una tienda junto a su madre. La pequeña inglesa Daisy Edmonds no ocultó su indignación frente a los percheros con prendas al ver que las que eran para nenas portaban inscripciones bastante menos comprometidas o más frívolas que las que eran para varones. Su mamá grabó el indignado monólogo sobre los lemas y las preguntas acerca del por qué y para qué, que sería motivo de admiración y envidia de más de una feminista adulta:
En el diálogo, imperdible, Daisy se rebela contra lo establecido y la madre la insta a pensar:
Daisy: "la ropa de chica dice 'Hey', 'Bella', 'Me siento fabulosa'... La de chico dice 'La aventura del desierto espera', 'Piensa más allá', 'Héroe'. Es injusto porque todo el mundo piensa que las chicas sólo deben de ser lindas y que los chicos sólo deben ser aventureros".
Madre: "¿Y qué pensás?"
Daisy: "Que es un error, ¿por qué la ropa de chicos y la de chicas tiene que estar separada? Si somos iguales..."
Daisy, indignada frente a las prendas.
Luego sigue:
Daisy: "¿Qué significa esto? (la ropa de varones). Significa viví tus propias aventuras, que nada te detenga, vive tus propios sueños... y 'Hey'. ¿Qué se supone que debe significar esto?"
Madre: "No sé, ¿qué te inspira a vos?"
Daisy: "No me parece inspirador, ¿qué parte de 'Hey' es la que funciona? No entiendo. Mirá, los varones tienen un 'Pensá más allá', que significa, sé aventurero, vive tus propios sueños... pero, insisto, 'Hey', ¿qué significa? ¿Acaso inspira algo a alguien?"
El video fue posteado por la mamá en Facebook y no tardó en viralizarse, con 12 millones de reproducciones. Y no es para menos, con la espontaneidad y frescura propia de la infancia, describe los prejuicios hacia la igualdad de género y cómo los mismos se traducen en un elemento socialmente aceptado como la indumentaria.
