14 Junio de 2022 14:17
Malas noticias. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dejó en clara su preocupación por el crecimiento en los casos de la viruela del mono. Por ese motivo, las autoridades convocaron a su comisión de emergencias para el día 23 de junio cuyo objetivo será coordinar diversas acciones en las zonas más afectadas del planeta.
En ese punto, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, afirmó en conferencia de prensa que la OMS registró, por ahora, 1.600 casos de viruela del mono, 1.300 casos sospechosos y 79 muertes. Y completó: “Estamos preocupados porque el brote sigue en expansión”.
Por otra parte, el titular de la entidad explicó frente a la prensa: “Ha habido deliberaciones internas, pero ahora, ante la expansión, hemos convocado la comisión de emergencias. Para eso es necesario diseñar un mecanismo de distribución justa de las vacunas si es necesario”.
Viruela del mono: qué es, cómo se contagia y cuáles son los síntomas típicos
Y continuó: “La situación actual es inusual, que el virus se comporta de modo diferente al pasado y afecta a más países. La proliferación actual de casos es inusual y preocupante. Para ellos, los técnicos de la organización escucharán a los países afectados antes de dar una respuesta coordinada”.
Por otra parte, más de 30 científicos de todo el mundo dijeron que la etiqueta de viruela del mono es discriminatoria y estigmatizante. Y dijeron: “Hay una necesidad urgente de cambiarle el nombre actual ya que no se ajusta a las pautas de la OMS que recomiendan evitar regiones geográficas y nombres de animales”.
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Y continuó: “En el contexto del brote global actual, la referencia continua y la nomenclatura de que este virus es africano no solo es inexacta, sino que también es discriminatoria y estigmatizante”. Por eso, La OMS está consultando a expertos en ortopoxvirus, la familia a la que pertenece la viruela del mono, sobre nombres más apropiados.
Otros nombres de enfermedades que van en contra de las pautas incluyen la gripe porcina, según recomendaciones conjuntas de la OMS, la Organización Mundial de Sanidad Animal y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación. Un representante afirmó: “Nombrar enfermedades debe hacerse con el objetivo de minimizar el impacto negativo, y evitar ofender a cualquier grupo cultural, social, nacional, regional, profesional o étnico”.
