02 Mayo de 2016 15:06
Todos conocemos o hemos jugado alguna vez el juego del Tetris, el que se trata de ordenar cada una de las piezas de diferentes formas, que van cayendo, rotándolas y ubicándolas de manera tal que no queden huecos o espacios entre ellas y una vez que la línea queda completa desaparece, el objetivo es lograr que no se llene la pantalla de filas y avanzar en los niveles, y una vez que empiezas a jugarlo cuesta dejarlo.
Se descubrió que las personas que jugaban durante muchas horas al tetris, después veían el patrón del juego en la vida real o incluso en sus sueños. Por esta razón, se le llamó efecto Tetris al fenómeno de obnubilación de los pensamientos, imágenes mentales y sueños, como consecuencia de haber realizado la misma actividad durante muchas horas. También sucede con otros juegos como por el Candy Crush Saga que puede provocar la sensación de querer alinear tres objetos similares en fila para que exploten, tal y como se hace en el juego con los caramelos.
Este fenómeno también afecta a otros sentidos, como son la audición y la cinestesia. El caso de la audición, la encontramos cuando la actividad que estamos realizando tiene un ruido característico, y una vez terminada esa actividad tenemos la sensación de seguir oyendo ese mismo sonido. Y en el caso de la cinestesia, sucede cuando una vez finalizada la actividad, seguimos sintiendo a nivel corporal la misma sensación que sentíamos al realizarla por ejemplo cuando pasas muchas horas viajando por automóvil en ruta y puedes seguir sintiendo el movimiento cuando ya te encuentras acostado en tu cama.
Unos de los profesionales que más se ha demostrado que experimenta este fenómeno, son los programadores informáticos, los cuales acostumbran a soñar con el código que están programando, o también los matemáticos cuando sueñan con ecuaciones. Pero también en la vida cotidiana encontramos casos, por ejemplo en personas con trabajos muy automatizados, oficios de movimientos metódicos y gente expuesta a un mecanismo durante un determinado tiempo, como los taxistas que viajando en tren buscan el espejo retrovisor al escuchar un sonido que viene de espaldas a donde están sentados.
Esto es debido a que ciertas actividades, nos sumergen en un estado de máxima concentración donde todos nuestros sentidos están funcionando hacia el mismo input (sistema de entrada de información), nuestro cerebro queda inundado de la misma información y tiene que esforzarse mucho para poder cambiar esa estructuración debido a que quedan patrones neuronales activos.
Se ha demostrado que ese estado al que nos trasladan ciertas actividades, puede ayudarnos a prevenir la formación de recuerdos e imágenes traumáticas después de vivir una situación emocional potencialmente dañina, ya que disminuirá la precisión, intensidad y frecuencia de los recuerdos.
Pero no solo eso, el tetris también es utilizado como terapia para mejorar ciertas habilidades cerebrales 12 sesiones de 30 minutos cada una, son suficientes para mejorar las habilidades espaciales como la rotación mental, percepción y visualización espacial. Enronces ¡A jugar tetris!
