06 Octubre de 2015 03:40

El retorno de los hinchas visitantes a los estadios de fútbol de la provincia de Buenos Aires comenzó con un traspié. Anoche, el partido entre Aldosivi y Lanús comenzó con una demora de veinte minutos debido a que el delantero de Aldosivi Pablo Lugüercio, recibió un piedrazo que fue lanzado desde la tribuna visitante asignada a Lanús. El impacto fue cerca del ojo, y aunque tuvo dificultades para ver durante varios minutos, fue asistido y pudo jugar el partido desde el inicio.
Así terminó el delantero de Aldosivi, Pablo Lugüercio, tras recibir un piedrazo de la hinchada de Lanús.
“Es una vergüenza, pero no pasa nada y sigue todo”, señaló Lugüercio luego de recibir el piedrazo cerca del ojo. Tras finalizar el encuentro, el jugador fue trasladado al hospital, donde le diagnosticaron una úlcera de córnea. Aunque no reviste gravedad, el episodio podría haber sido mucho peor, ya que los médicos indicaron que si impactaba más cerca del ojo, podría haber perdido la vista.
El de ayer fue el único partido de la fecha que contó con hinchas visitantes. La agresión ocurrió a minutos de que comenzara el encuentro, cuando el equipo local se encontraba precalentando en el campo de juego.
El encuentro entre Aldosivi y Lanús es de los primeros que se llevan a cabo con hinchas visitantes en la provincia de Buenos Aires, con autorización de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide). El director técnico de los marplatenses, Fernando “Teté” Quiroz señaló que Lugüercio “es un jugador muy noble y la decisión de jugar pasó por él”, y pidió: “Hay cosas con las que hay que tener más cuidado”.
De todos modos, más allá de las demoras de 20 minutos, el encuentro se desarrolló con normalidad. Aldosivi venció de local a Lanús por 3 a 1.