13 Septiembre de 2016 20:54
Los datos de la inflación de agosto representan un bálsamo para el Gobierno, un salvavidas que no podría haber llegado en mejor ocasión . Es que con estas cifras, las más bajas en más de una década, los funcionarios pueden justificar su rechazo a reabrir paritarias como reclaman algunos gremios, alejar la amenaza de un paro general y, al mismo tiempo, convencer a los empresarios internos y externos que las condiciones son óptimas para que llegue la tan anunciada y esperada "lluvia de dólares".
Sin embargo, los mercados miran con atención el desarrollo de la denominada core inflation, inflación núcleo o subyacente, que es aquella que mide los índices de precios al consumidor (IPC) sin considerar aquellos productos y servicios cuyos valores dependen de la época del año o de factores externos a la política monetaria.
Jorge Todesca, titular del INDEC.
El celebrado 0,2 % de aumento en agosto que precisó el INDEC es importante, pero "la otra" inflación sigue siendo alta y preocupante.En ese mes, dichos precios, que representan el 70 % de la canasta de productos y servicios, creció el 1,7 por ciento, en tanto en julio fue del 1,9% y en junio arañó el 3 %.
Asi, el sistema de medición del INDEC discrimina para su análisis en tres sectores: bienes y servicios con comportamiento estacional como frutas, verduras, ropa, transporte por turismo y alojamiento y excursiones, que representa el 10,8% de la canasta total del IPC.
Otro ítem son los bienes y servicios cuyos precios están sujetos a regulación o tienen alto componente impositivo como combustibles, electricidad, agua y servicios sanitarios, sistemas de salud y servicios auxiliares, funcionamiento y mantenimiento de vehículos, correo, teléfono, educación formal y cigarrillos y accesorios, representan el 19,4% de la canasta total del IPC. El resto es lo que se conoce como inflación núcleo.
Las frutas y verduras integran el grupo de bienes y servicios "con comportamiento estacional".
En cambio, los "precios regulados", que son las tarifas fijadas por el Gobierno, tuvieron una caída del 1,8 por ciento, mientras que los "precios estacionales" bajaron el 4,3.
En cuanto a las variaciones de precios por rubro durante el octavo mes del año, Alimentos y Bebidas registró una suba del 0,7 por ciento; Indumentaria y Equipamiento para el Hogar, 0,8; y los gastos para la Salud, un 3,1 por ciento.
El rubro Alimentos y Bebidas registró una suba del 0,7 por ciento en agosto.
Por otro lado, Transporte y Comunicaciones subió 0,8 por ciento; Educación, 2,3 y Otros Bienes y Servicios, 0,9 por ciento. Por efecto de las tarifas, el rubro Vivienda y Servicios Básicos mostró una baja del 5,6 por ciento, mientras que Esparcimiento se redujo 0,6 por ciento.
Entre los productos que mayores incrementos registraron en agosto figuran el aceite por litro y la batata por kilo, con una suba del 12 por ciento, en tanto que la baja mas fuerte fue la del tomate redondo, con el 22,5 por ciento.
El aceite por litro, uno de los productos con mayor incremento.
Según un sondeo de Reuters, los especialistas esperaban en promedio una inflación del 0,8 por ciento, basada en gran parte a la decisión judicial de retrotraer los aumentos de las tarifas de servicios públicos.
Sin embargo, más allá del efecto por la suspensión del tarifazo sobre el IPC, algunos analistas atribuyen la desaceleración de los precios también a la recesión, la pérdida de poder adquisitivo y su impacto sobre las ventas.
Fuentes de Hacienda precisaron que los datos de inflación del mes pasado son los más bajos desde noviembre de 2004, cuando el aumento de los precios fue cero, lo que fue interpretado en aquél momento por el oficialismo como otra prueba de la tendencia a la desaceleración de los precios.
El presidente se adelantó esta mañana a la publicación del IPC del INDEC, y anticipó una evolución favorable de los precios. "Recibimos un país en recesión, con altísima inflación, pero la hemos empezado a someter y se empiezan a ver signos de que la recesión va a quedar atrás", aseguró.
En el Foro de Inversores, Macri se adelantó a la difusión de los datos del INDEC.
El jefe de Estado remarcó que el país vive un cambio de época que se sustenta en la verdad y la apertura al mundo. "Esto es mucho más profundo que la llegada de un nuevo gobierno, la confianza crece en base a haber restablecido la verdad y el valor de la palabra", expresó.
La planilla del INDEC de agosto muestra que el mes pasado, el núcleo, que representa el 70 por ciento de la canasta de productos y servicios, que excluye variaciones estacionales y tarifas reguladas, crecieron el 1,7 por ciento. El valor es similar al registrado en julio, cuando la inflación subyacente fue del 1,9 por ciento.
El organismo estadístico precisó que por 14 días de vigencia, el impacto que el cuadro tarifario de gas natural tuvo en el IPC general fue de una caída del 0,7 por ciento, equivalente a una baja del 35,6 por ciento respecto del mes anterior.
La rebaja tarifaria del gas, clave para que la inflación sea del 0,2 por ciento.
En septiembre, con una vigencia del 17 días, la rebaja tarifaria impactará en una caída del 0,6 por ciento con una rebaja de precios del 48,5 por ciento respecto del mes anterior.
Según el INDEC, el nivel de actividad económica (EMAE) retrocedió un 4,3 por ciento interanual en julio debido al magro desempeño del sector fabril, la construcción y el consumo interno, la merma interanual más pronunciada desde octubre del 2014. Si se considera la variación respecto del mes de mayo, la caida fue de 0,3%.
Asimismo, el organismo corrigió las cifras del PBI tomando como base los datos económicos del 2004, cuando todavía no se había producido la intervención del kirchnerismo. En el primer trimestre de este año, el PBI bajó 0,7 % respecto al último del 2015, lo que marcó tres trimestres consecutivos de bajas.
En este marco, el Indec dio cuenta de que la actividad industrial de junio presentó una caída de 6,4% con respecto al mismo mes de 2015 y acumuló una baja del 3,3 % en el primer semestre del año.
