22 Abril de 2016 09:57
Si la cruzás por la calle, nunca pensarías que tiene casi 61 años ni que es abuela de 2 nietos. Tiene un cuerpo escultural y una actitud que va con todo.
Yasmina Rossi no sólo posa para las grandes marcas a una edad en que la mayoría de las modelos está retirada, sino que también se asegura de que sus arrugas se destaquen en las fotos en que aparece.
"Me gusta el aspecto que tengo ahora más que el que tenía hace 20 años", dice. "Mi cuerpo es más agradable y me siento más feliz que a los 20".
Seguramente la genética tenga mucho que ver en su estado físico, como también el hecho de que sea una mujer optimista y con un espíritu libre, lo cual es parte de su belleza. Yasmina se define como "modelo, artista en todas las facetas de la vida, fotógrafa, diseñadora de moda y de interiores, ceramista...".
Mujer multitask, su carrera como modelo empezó a sus 30 y el éxito apareció cuando cumplió los 45 años.
Desde entonces, las firmas más conocidas -como Hermes, Yves Saint Laurent o Jil Sander- no se resistieron a su singular estilo.
Al preguntarle sobre sus trucos de belleza, revela que no hay ningún truco secreto: "todo lo que hago es comer alimentos orgánicos, desde mucho antes de que se pusiera de moda", explica Rossi. "Uso aceite en mi piel, en mi cabello. Me froto la piel una vez por semana con aceite de oliva y azúcar. Como una palta al día, y carne y pescado orgánicos".
Afirma que el ejercicio es clave, pero que no se debe exagerar. "Esto es muy importante", dice. "Y no tomar medicamentos si no es necesario. Hay que ir con la naturaleza en lugar de luchar contra ella, esta es la regla para todo", cuenta.
No importa el secreto, Yasmina es modelo de una nueva mujer, segura de sí misma, que no teme cumplir años ni al camino por recorrer, y se abre paso para lograr sus objetivos, con libertad.
