06 Octubre de 2025 13:20
El deterioro del sistema sanitario argentino avanza a paso firme y silencioso. Así lo advirtió Hugo Magonza, titular de la Unión Argentina de Salud (UAS), quien encendió las alarmas al señalar que "cada vez más familias están dejando de pagar las empresas de medicina prepaga para volver a las obras sociales o atenderse directamente en los hospitales públicos". Según el dirigente, este fenómeno, inédito en su magnitud, "podría provocar a mediano plazo un colapso en el sistema de salud argentino".

En una entrevista en el programa Salud en serio, emitido por la señal de streaming @estoeslp, Magonza describió el impacto devastador que la pérdida de ingresos de los sectores medios está generando en la atención médica privada. "Observo un fenómeno nuevo: gente con patologías que deja de pagar la prepaga y vuelve a la obra social o al hospital público", advirtió. Y añadió que "es difícil hacer un análisis en una situación tan dinámica, con todas las variables en movimiento".
Magonza asumió la conducción de la UAS a mediados de 2024, en reemplazo de Claudio Belocopitt -titular del Swiss Medical Group-, luego de la controversia que este último mantuvo con el Gobierno nacional por los aumentos de cuotas tras la desregulación del sistema de salud dispuesta por el decreto 70/2023, una de las primeras medidas del presidente Javier Milei. Desde entonces, el sector privado atraviesa una combinación de inflación descontrolada, pérdida de afiliados y debilitamiento financiero.
En ese marco, el dirigente también alertó sobre el proceso de concentración que vive la medicina privada. "Durante muchos años se sancionaron leyes que subían la vara de las prestaciones, pero lamentablemente, una de las consecuencias fue que los más chicos no alcanzaron esa vara y fueron quedando en el camino", explicó. Para Magonza, "el fenómeno de concentración es una consecuencia no deseada de esas medidas", lo que en la práctica significa menos competencia y menos opciones para los usuarios.

Desde octubre, las principales empresas del sector confirmaron subas que rondan entre el 1% y el 2,4%, en línea con la inflación oficial de agosto (1,9% según INDEC). Swiss Medical aplicó un incremento del 1,9%, OSDE del 1,85% (2,3% en Patagonia), Galeno entre el 1,9% y el 2,4%, mientras que Medicus, Medifé, Avalian y Luis Pasteur fijaron alzas similares. El Hospital Italiano aumentó un 1,1% promedio y el Hospital Alemán un 1%.
El Gobierno, por su parte, intentó mostrar señales de control con la Resolución 1725/2025 de la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS), que derogó la normativa anterior y creó el modelo de facturación "Cuota Transparente", una herramienta que promete mayor claridad sobre los aportes y subsidios que recibe cada afiliado. Sin embargo, la medida no impidió que las empresas siguieran ajustando sus tarifas ni frenó la fuga de usuarios del sistema privado.
Magonza, en tanto, defendió que los aumentos de las cuotas "estuvieron por debajo de la inflación y muy por debajo de la evolución del dólar", lo que -según dijo- "deterioró la estructura financiera de muchas empresas del sector". También reconoció que el peso de los medicamentos se disparó en los últimos años: "En pocos años pasó de representar menos del 20% del gasto total a superar el 40%". "Ya hay gente del Gobierno trabajando en eso", adelantó.

De esta manera, la clase media, golpeada por la pérdida de poder adquisitivo y los sucesivos aumentos, empieza a abandonar la medicina privada. El sector público, a su vez, no cuenta con recursos suficientes para absorber esa demanda creciente. La política de desregulación que el Gobierno presentó como una vía hacia la "libertad de mercado" amenaza con dejar al sistema sanitario librado a su suerte y a millones de argentinos, sin cobertura.

