30 Mayo de 2025 08:27

En medio de los crecientes conflictos gremiales en el sistema de salud pública, con epicentro en el Hospital Garrahan, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, se pronunció este martes sobre los reclamos salariales y las protestas que se replican en distintos sectores del Estado. "Todos los sectores tienen que tener paciencia", dijo la funcionaria en una entrevista en la señal oficialista LN+, en la que defendió el rumbo económico del gobierno de Javier Milei y justificó la falta de respuestas frente al deterioro del salario real. Bullrich evitó referirse en detalle a la situación del Garrahan, pero argumentó que "la Argentina está ordenándose económicamente" y que eso implica ajustar áreas "mal administradas". En ese contexto, afirmó que "el país va a ir recomponiendo los salarios", aunque sin especificar plazos ni medidas concretas.
Cabe destacar que la situación del hospital pediátrico de referencia nacional es crítica: arrastra recortes presupuestarios y sufre el deterioro salarial de sus trabajadores, los cuales atraviesan una "situación de extrema urgencia" con "condiciones inhumanas" de trabajo y sueldos de $797 mil. La ministra equiparó el ajuste con un tratamiento médico y señaló: "Estamos en un tratamiento. No vale volver a romper el chanchito para tirar la Argentina al vacío". "El país está pasando un trauma", insistió Bullrich, quien además cargó contra sectores que, según ella, "no entienden que es un momento difícil del país". "No todo vale políticamente por ser de otra ideología", disparó.
De esta manera, la funcionaria tuvo críticas implícitas a quienes cuestionan y marchan en contra del ajuste. En otro tramo de la entrevista, Bullrich salió al cruce de las denuncias sobre posibles prácticas de vigilancia estatal en el marco del nuevo plan de inteligencia impulsado por el Gobierno. El proyecto, revelado por el periodista Hugo Alconada Mon, detalla estrategias para controlar la "manipulación de la opinión pública" y prevenir amenazas contra la "confianza en los funcionarios". Bullrich negó que se trate de espionaje interno y aseguró que el documento "no tiene una coma" que sugiera vigilancia indiscriminada.
La ministra enmarcó el plan en la "inteligencia criminal", y habló de ciberseguridad, ciberdelito y posibles ataques terroristas. "En ningún momento hay subjetividad de acuerdo a un colectivo, es todo objetivo", sostuvo. Luego, apuntó contra el presidente de la Comisión Bicameral de Inteligencia, el senador radical Martín Lousteau, a quien acusó de filtrar el documento. "En cualquier país serio estarían con una causa. Es una barbaridad", remarcó. También desestimó las críticas al contenido del plan. "Me parece una interpretación sesgada de lo que plantea. Deberían estar juzgados todos los que lo recibieron", agregó.

Consultada sobre una posible candidatura en 2025, Bullrich no descartó presentarse y dejó la puerta abierta a una eventual renuncia para asumir un rol electoral. "Si me requieren y el equipo decide que es mejor que me presente, lo haré. Pero ahora estoy con una misión", afirmó. También adelantó que La Libertad Avanza buscará ampliar su base de alianzas y que hay "muchos sectores" que podrían sumarse al oficialismo.
En paralelo, la ministra redobló sus críticas contra el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. Lo acusó de trabajar "en espejo" al gobierno nacional y de ser responsable de la "conurbanización" de ciudades como Campana o Zárate. "Pensó toda la vida mal y por eso la Provincia es la mayor fábrica de pobres", disparó y cuestionó la postura del gobernador frente a las medidas de desregulación económica.

Como ejemplo, mencionó la reciente iniciativa del Gobierno nacional para promover la bancarización de dólares, y acusó a Kicillof de querer gravar esos movimientos por "razones ideológicas". "En lugar de apoyar, joroba a la gente. Lo hace solo porque es opositor", concluyó.