18 Septiembre de 2025 11:33
En una jornada que bien podría que a los libertarios les encantaría olvidar, el Congreso rechazó los vetos presidenciales de Javier Milei sobre dos leyes fundamentales: la Ley de Emergencia Pediátrica y la Ley de Financiamiento Universitario.
El episodio estuvo marcado por discursos encendidos, intervenciones teatrales y errores matemáticos dignos de un sketch de Capusotto que dejaron en evidencia las tensiones de fuego que atraviesa La Libertad Avanza ante una constante pérdida de gobernabilidad.

Con una votación que no dejó lugar a dudas, los diputados dieron un golpe directo al gobierno de Milei. La Ley de Emergencia Pediátrica, destinada a aliviar la crisis en hospitales como el Garrahan, obtuvo 181 votos a favor, 60 en contra y una abstención. Por su parte, la Ley de Financiamiento Universitario recibió 174 votos afirmativos, 67 negativos y dos abstenciones, en una sesión que dejó claro que la educación y la salud pública son temas que trascienden las líneas partidarias.
El rechazo no solo fue numérico; también fue simbólico. Silvia Lospennato, diputada del PRO, se convirtió en la inesperada "rebelde" del bloque al votar en contra de los vetos presidenciales haciendo que la temperatura de Cristina Ritondo suba tanto que le terminó espetando en la cara -con dedito índice levantado- el descontento por haber votado en contra del veto presidencial . Lospennato criticó la falta de planificación fiscal del gobierno y recordó que el Congreso lleva dos años sin una Ley de Presupuesto, un detalle que parece haberse perdido en el caos administrativo del oficialismo.
Por otro lado, Juliana Santillán, diputada libertaria, intentó defender los vetos presidenciales con argumentos económicos que terminaron siendo más confusos que convincentes. Al mencionar cifras inexistentes como "un millón setenta mil millones", Santillán se convirtió en el blanco perfecto para memes y críticas en redes sociales. Su intento de corregir el rumbo con frases del libreto libertario como "No se puede defender la educación destruyendo las cuentas públicas" quedó sepultado bajo el peso de su error numérico.
Si algo caracterizó esta sesión fue su teatralidad. Aldo Leiva, diputado de Unión por la Patria, decidió aparecer con una peluca durante su intervención sobre la Ley de Emergencia Pediátrica. Con un tono más propio de un monólogo satírico que de un debate legislativo, Leiva acusó a Karina Milei de supuestas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad, lo que provocó la indignación del presidente de la Cámara, Martín Menem, quien le cerró el micrófono.
No menos llamativa fue la intervención de Esteban Paulón, diputado santafesino de Encuentro Federal, quien llevó un cartel con imágenes de Mauricio Macri, Patricia Bullrich, Luis "Toto" Caputo y Javier Milei, acompañado por la frase: "Lo 'peor' sigue pasando". Una crítica directa al discurso optimista del presidente sobre el presupuesto 2026 que dejó claro que las promesas del oficialismo tienen más detractores que creyentes.

Mientras dentro del recinto se desarrollaba esta tragicomedia política, afuera miles de estudiantes, pediatras y dirigentes sociales se manifestaban frente al Congreso en el marco de la Marcha Federal. Los festejos estallaron cuando se conoció el rechazo a los vetos presidenciales, demostrando que la presión social sigue siendo un factor clave en las decisiones legislativas dejando así un sabor a derrota definitiva para Javier Milei.

