22 Julio de 2015 09:51
El careo se dio. Pero en privado. Claudia Villafañe y Diego Maradona tuvieron el miércoles pasado una reunión secreta, previa a la audiencia que tuvo lugar el martes por la tarde en los Tribunales de la calle Talcahuano. El encuentro fue en la casona que el futbolista alquila en Tigre y, aunque intervinieron Dalma y el abogado Matías Morla, la “Bruja” y el Diez terminaron a los gritos. “Ladrona, sos una ladrona”, le espetó el futbolista indignado.
Tal como pudo confirmar BigBang, los protagonistas del escándalo mediático del momento intentaron acercar posiciones lejos de las cámaras y de la Justicia. Claudia asistió a la cita con su hija mayor, quien intentó en todo momento bajar la intensidad del violento diálogo entre sus padres. A Diego lo escoltó su abogado, el mismo que lo representó el martes en el careo de conciliación.
Claudia asistió acompañada por su hija mayor, pero ni Dalma logró tranquilizar a Diego.
El acalorado intercambio no rindió sus frutos y sólo empeoró el agrietado vínculo que hoy los une. Al parecer, la rubia le negó todas y cada una de las acusaciones que Diego le disparó desde el otro lado del ring. Indignado y cansado de las excusas de Villafañe, el ex futbolista dio por terminada la cita y le dio instrucciones directas a Morla: quiere recuperar el desvío millonario que confirmó la auditoría inglesa, caiga quien caiga.
LAS HORAS DESPUÉS DEL CAREO
Fernando Burlando, el abogado penalista que Claudia contrató para hacerle frente a la avanzada judicial, desestimó a la salida de los Tribunales un posible acuerdo de partes y hasta amenazó con solicitar una investigación de la AFIP para determinar cuán al día están los impuestos del Diez. Pero la ferocidad mediática con la que el letrado salió al cruce del escándalo no coincide con los pedidos de Claudia quien, por las últimas horas, le habría enviado mensajes de texto a su ex marido para arreglar la situación. Todo, claro, lejos de los Tribunales.
