07 Junio de 2016 09:21
Si bien sus padres regresaron al rato a buscarlo en el bosque (con osos salvajes), no lo encontraron. Yamato Tanooka? es el chiquito japonés abandonado por su familia en un bosque como castigo por porque se portó mal mientras viajaban en auto. Fue encontrado casi una semana después a cinco kilómetros de donde lo dejaron, con un cuadro de hipotermia y deshidratación, y arañazos en las piernas y manos. Sólo había ingerido un poco de agua.
Los padres de Yamato no son los únicos que no han tenido reparos en abandonar a sus criaturas. Aquí, otros ejemplos públicos de padres indignos de sus hijos.
El abandono de niños resulta traumártico por el resto de nuestras vidas.
Mamá echó de su casa a su hijo de 10 años:
En junio de 2015, en la localidad de Jesús María, Córdoba, una mujer fue detenida después de golpear a su hijo de 10 años y echarlo de la casa sin permitirle sacar nada. El niño fue rescatado por una vecina, que lo encontró llorando en la calle en la madrugada y lo llevó a su casa, le dio ropa, calzado, e hizo la denuncia. La señora describió que el chico tenía golpes en los brazos y en el cuello. Las lesiones fueron constatadas en el Hospital de Niños, adonde fue trasladado. La madre fue detenida y se le imputaron lesiones leves calificadas por el vínculo, y tendría antecedentes similares por maltrato de otro hijo.
Violencia y castigo infantil.
Lo dejaron en el auto y entraron al casino:
En septiembre de 2014, en la localidad de Godoy Cruz, un matrimonio dejó a su bebé recién nacido en el interior de un auto durante cinco horas, para ir al casino. Con sólo 15 días, el chiquito lloró por más de 40 minutos dentro de su auto en el estacionamiento, hasta que la cuidadora dio aviso a la policía, que tuvo que llamar por los altoparlantes a los padres, que estaban muy entretenidos apostando.
Ciertos castigos son inexplicables.
Lo quemó con agua hirviendo:
Hace pocos días, un niño de apenas ocho años de edad ingresó al Hospital La Caleta, en dicha localidad peruana, con quemaduras de segundo grado. El chico había sido castigado por su madre, quien no tuvo la mejor idea que tirarle agua hirviendo porque no le había hecho caso. Le provocó quemaduras de primer y segundo grado profundo en el torso, la espalda y el brazo.
No se pueden defender.
Su padre le provocó un daño irreparable:
Cuando tenía 15 meses de edad, Charlie, el hijo de Joanne Senior, fue sacudido con excesiva fuerza por su irritado padre, quien le causó lesiones físicas y corporales graves. El padre fue condenado a cuatro años de cárcel y hoy, nueve años después, Charlie no puede hacer nada en forma independente y sufre depresiones.
Charlie y su mamá.
