El famoso y controvertido infecólogo y profesor francés Didier Raoult, aseguró que la pandemia del coronavirus está próxima a terminar, al mismo tiempo que indicó que no cree que vaya a existir una segunda ola de contagios.

Todas las semanas, el médico realiza la publicación de un nuevo video en su canal de YouTube, y este semana afirmó que “la epidemia está en tren de resolverse y no se ve en ninguna parte una segunda ola". 

"No habrá sino casos esporádicos, que aparecerán aquí o allá. Eventualmente, si alguien está súper contagioso, habrá algunos casos alrededor de él pero eso no se traducirá en una dinámica epidémica”, dijo el director del Instituto Mediterranée Infection.

Según comentó, en Marsella la enfermedad está por desaparecer, ya que la hidroxicloroquina, medicación que él utiliza para tratar a los pacientes, disminuye la portación viral.

"En España e Italia está la misma tendencia. Hay que esperar lamentablemente varios muertos que hoy están en terapia intensiva. Estamos viendo que en todos lados que este episodio está en tren de resolverse. Esta epidemia está en vías de desaparecer”, aseguró.

Del mismo modo, aclaró que como se trataba de una enfermedad que no era conocida, la mayor parte de las afirmaciones que se hicieron sobre el coronavitus eran falsas, lo que llevó a que hubiera mucha incertidumbre.

Raoult es miembro del comité científico que asesora al gobierno de Emmanuel Macron y desde hace ya varias semanas, utiliza para el tratamiento de pacientes infectados a la hidroxicloroquina, pese a que todavía ningún país la utiliza de manera oficial ya que su efectividad no pudo ser comprobada de manera científica.

Sobre esto, defendió el uso de este medicamento, debido a que existen amplios trabajos que vienen de China que demuestran que su tratamiento “permite disminuir la carga viral, reducir el ingreso a reanimación y salvar vidas”.

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“El único medicamento que hay con evidencias publicadas en los revistas científicas con estudios es la hidroxicloroquina. Yo nunca dudé de su eficacia”, sostuvo.

Y agregó:"Hay que sanar a la gente, no dejarlos en la casa. Si uno sana a la gente, aún si no tiene los medicamentos precisos que permite matar el virus,el enfermo irá mejor al final y habrá menos muertos. La tasa de mortalidad en nuestro instituto fue del 0,8% ”.

Sobre esto, dijo por último que la verdadera lección que tiene que quedarle al mundo entero es que para las nuevas enfermedades "hay que estar listo, hay que ser rápido,organizado y hay que estar con el espíritu abierto" porque, por ejemplo, el coronavirus nos ha enseñado "muchísimas cosas sobre la tensión respiratoria y la coagulación".