30 Diciembre de 2015 17:00
Ricardo Barreda, condenado por matar a su esposa, su suegra y sus dos hijas en 1992, vivirá en la casa de un amigo en el Tigre.
El odontólogo fue beneficiado con la libertad condicional esta tarde. Por orden del juez Raúl Dalto, dejará la cárcel de Olmos entre esta noche y mañana.
Barreda, en días más felices.
Barreda pasó el último año detenido en la Unidad Penal 25: el propio Dalto había revocado su libertad condicional, por considerar que era peligrosa la convivencia que mantenía con su pareja Berta André, fallecida en julio, en el barrio de Belgrano.
"La situación de peligro es inminente producto de la combinación de la presunta debilidad mental de André y el riesgo de provocar una reacción de Barreda", había planteado entonces el magistrado.
Barreda, según el juez, había puesto a su ex pareja en peligro.
la relación con berta
“El viejito es gruñón pero en el fondo es un tierno incurable, es un niño en cuerpo de viejo”, había dicho “Pochi” André sobre su novio. Convivieron durante siete años.
Una relación tirante.
La pareja se había conocido en la cárcel y en 2008, cuando él salió en libertad, lo llevó a su casa. Hace ocho meses lo acusó de maltratarla (le decía “Chochán”) y el femicida volvió a prisión.