Tendría 22 años
06 Junio de 2025 16:18
El caso de la niña de cuatro años Madeleine McCann, quien desapareció de forma misteriosa el 3 de mayo 2007 cuando estaba con sus padres en un apartamento vacacional de Praia da Luz, localidad de la ciudad portuguesa de Lagos, ganó protagonismo en los últimos días, luego de que se fortaleciera la teoría acerca de que fue atropellada por una mujer alemana en estado de ebriedad y que luego fue ayudada por su pareja británica a descartarla al mar.
"¿Por qué la trajiste?", gritó un sinfín de veces el hombre al momento de que, de forma presunta, su mujer le mostraba el cuerpo de la niña que había atropellado en la ruta. El testimonio fue ofrecido por un vecino de la pareja que reportó que oyó una fuerte discusión entre ambos la mañana siguiente a la desaparición de la menor que estaba a unos días de cumplir los cuatro años.
Esta pista intentó ser investigada hace muchos años, pero de acuerdo a lo reportado por Mirror las autoridades alemanas se negaron a aceptar la propuesta portuguesa de infiltrar a alguien que pudiera conseguir una confesión de lo ocurrido por parte de la mujer. La idea era desplegar un agente encubierto con ese fin y que la sospechosa caiga en la trampa.
Esta teoría se fortaleció en 2018 con la denuncia de la hermana del hombre británico, quien le dio sentido a la declaración del anterior testigo, cuando contó que él le confesó que ayudó a su pareja a tirar al océano a la niña desaparecida en 2007 luego de que ella llegara con el cuerpo en sus manos tras haber estado bebiendo en el pub cercano Ocean Club.
La información que tenía la policía portuguesa habría estado en reserva durante siete años, cuando las autoridades alemanas se negaron a avalar la investigación clandestina. Finalmente, la línea que luego prosperó fue la de que el sospechoso Christian Brueckner, condenado a siete años por violar a una mujer de 72 años en Algarve en 2005, tuvo algo que ver.
Al principal implicado que hubo hasta el momento tanto para la Justicia portuguesa como la alemana, jamás se lo acusó por la falta de pruebas sólidas. El hombre de 47 años se encuentra pronto a salir en libertad por su anterior detención. En ese sentido, si bien ahora podría quedar en segundo plano a partir de las novedades que involucran más de lleno a la pareja alemano-británica, hubo rastrillajes esta última semana en la zona de la desaparición.
La búsqueda que emprendieron englobó un área de 50 hectáreas entre Praia da Luz y Lagos, y en la misma participaron investigadores alemanes y portugueses. Allí registraron tres edificaciones abandonadas con una excavadora especializada JCB con la que removieron escombros, mientras le daban uso a un radar de penetración terrestre.
En los tres días que duró la búsqueda de Madeleine McCann, también hubo desmalezamientos y cortes de árboles para limpiar el entorno de un antiguo pozo de drenaje donde se sospecha que podría haber sido arrojada la niña. Sin embargo, si bien allí hallaron un asiento infantil de automóvil y huesos de animales, no hubo ninguna prueba concluyente que pudiera determinar que fue el lugar donde perdió la vida.
