06 Noviembre de 2025 10:56
Desde Miami, y antes de participar en el America Business Forum, el presidente Javier Milei volvió a dejar en claro cuál es su brújula económica y geopolítica: Estados Unidos. En una entrevista con el Financial Times, el mandatario libertario celebró la intervención del Tesoro estadounidense en los mercados argentinos, defendió el sistema de bandas cambiarias, anticipó más recortes y prometió que su programa de ajuste "no se modificará bajo ninguna circunstancia". "El Tesoro estadounidense intervino oportunamente cuando vio una oportunidad de negocio", sostuvo Milei, al referirse a la operación en la que el organismo compró pesos y habilitó una línea de crédito por 20.000 millones de dólares. En el mismo tono, elogió a Scott Bessent, el financista que lidera el Tesoro norteamericano, y despreció las críticas locales: "¿Qué cree usted que vale más? ¿El criterio de un experto que ha tenido mucho éxito y cuenta con el respaldo del Tesoro estadounidense, como Bessent, o el de un grupo de ineptos locales?".

Milei también ratificó que no habrá cambios en el esquema cambiario. "Las bandas están diseñadas para que se amplíen con el tiempo, y llegará el momento en que ya no serán relevantes", explicó, defendiendo un modelo que deja al peso cada vez más expuesto a la especulación. Pero la frase más contundente llegó cuando reafirmó su fe en el modelo norteamericano y en el liderazgo de Donald Trump: "Estados Unidos decidió abiertamente ser el líder de la región y lo celebro con fuerza". En la misma línea, aseguró que "América Latina está experimentando un renacimiento liberal" y deseó que "la ola azul continúe. Ya hemos tenido suficientes rojos".
El presidente no disimuló su entusiasmo con la nueva política exterior estadounidense: "Antes, Estados Unidos se preocupaba por ayudar a los países que no eran aliados, alimentando a sus propios enemigos. Hoy han dado un giro radical, lo cual es fabuloso. Apoyo a los aliados y ningún apoyo a los que no lo son. Me parece brillante", declaró. En el plano económico, Milei adelantó que su objetivo es llevar el gasto público al 25% del Producto Bruto Interno, lo que implicará nuevos recortes sobre los sectores más sensibles. En esentido, explicó que aun faltan 6 puntos de ajuste después de haber recortado once.
Al mismo tiempo, proyectó un crecimiento optimista de "entre el 7% y el 10% en 2026", muy por encima de las previsiones oficiales. El mandatario se mostró convencido de que Argentina volverá pronto a los mercados internacionales. "Creo que en 2026 Argentina estará en el mercado. Nuestro compromiso con el pago de la deuda es inquebrantable", afirmó, destacando además que el swap con Estados Unidos "cubrirá la posición de liquidez si no se pueden refinanciar las deudas". En tono ideológico, Milei insistió en su cruzada contra lo que llama "las ideas socialistas que han arruinado el país durante 100 años".

Además, garantizó que La Libertad Avanza seguirá "matando esas ideas" mientras mantenga el poder. También se refirió a la salida de Guillermo Francos del Gabinete, y confirmó que la relación con las provincias quedará en manos de Diego Santilli, al que describió como "un hombre de diálogo y consenso". Alineado con la Casa Blanca y el trumpismo, apoyó la destrucción de lanchas venezolanas "que transportaban drogas" y calificó a Nicolás Maduro como un "narcodictador". "El mundo actual se dirige hacia un formato diferente, en el que habrá un bloque liderado por Estados Unidos, un bloque liderado por Rusia y un bloque liderado por China", sentenció.

