05 Septiembre de 2025 09:45
La vida amorosa de las celebridades suele dejar perlitas inesperadas y esta vez la protagonista fue Ángela Torres. La actriz y cantante, actual panelista en LuzuTV, se animó a compartir detalles poco conocidos de su relación con Thomas Nicolás Tobar, alias Rusherking. Todo surgió días atrás, en medio de una charla descontracturada sobre viajes en avión y la eterna pregunta: ¿vale endeudarse para volar en primera clase?
Entre risas, Ángela se sinceró: "A mí me pasó que el año pasado salía con un chico que tenía bastante plata y yo no tenía ni un cuarto de la plata que tenía él". Aunque evitó dar nombres, su compañero -y dueño del canal se streaming- Nico Occhiato la mandó al frente y lo dijo sin vueltas: "¿Rusherking?". Ella no lo desmintió. Fue entonces cuando Flor Jazmín Peña repreguntó: "¿Él no colaboraba en un 25%?", y la cantante solo alcanzó a responder con un seco: "Bah".
Con humor, pero también con un dejo de reproche, Ángela confesó: "Yo vivía fingiendo que era millonaria como él, me copiaba y hacía los mismos gastos que él, entonces me separé y quedé seca". No obstante, la nieta de Lolita Torres subrayó su autonomía económica: "Yo siempre fui muy independiente, siempre me mantuve sola desde muy chiquita y no estoy acostumbrada a pedir plata para pagar algo, siempre soy yo la que paga".
La confesión, como era de esperar, rebotó en las redes y llegó a oídos del mismísimo Rusherking, que minutos antes del encuentro entre la Selección Argentina y el seleccionado venezolano decidió romper el silencio con un descargo breve pero picante. En su cuenta de X, escribió: "Hasta acá me guardé mi opinión... pero calculo que ya se dieron cuenta quién se paseó por mil programas hablando de su ex relación, y quien fue el que nunca dijo nada y guardó respeto".

En un segundo mensaje, el músico aclaró su postura y dio por cerrado el tema: "No tengo más interés en hablar del tema tampoco, no lo necesito... estoy bastante tranquilo, feliz y alejado de querer exponer mi vida". Así, lo que empezó como una anécdota graciosa en un programa terminó en un ida y vuelta mediático que confirmó algo: el romance no terminó en tan buenos términos y si bien aparentemente quedó atrás, las repercusiones todavía dan que hablar.

