20 Agosto de 2025 14:02
El prescripto crimen de Diego Fernández Lima, el adolescente de 16 años desaparecido en 1984 y hallado hace pocos meses enterrado en una casa de Belgrano lindera a donde vivió por algunos años el músico Gustavo Cerati, continúa en el centro de la atención pública. Luego de que por falta de congruencia el juez rechace la indagatoria que el fiscal solicitó para el principal sospechoso por los delitos de encubrimiento agravado y supresión de evidencia, la defensa de Cristian Graf celebró la decisión judicial.
Para el abogado Martín Díaz lo propuesto por el fiscal Martín López Perrando y rechazado por el titular del Juzgado Nacional en lo Criminal N°56, Alejandro Litvack, "era una artimaña jurídica para pretender acusar a una persona inocente" y aseguró que todo lo que deba declarar su representado sobre el homicidio investigado lo hará "únicamente ante la Justicia". "No hay congruencia. Entre los elementos hay una infamidad probatoria total", señaló.

El letrado rescató que el magistrado exigió una mejor fundamentación y precisión sobre la acusación hecha contra su cliente. "Lo que el juez no ordenó fue la citación a declaración indagatoria y no lo hizo porque no ve elementos concretos ni sólidos que puedan llevarlo a pensar que el delito que acusa el fiscal tenga relación con la prueba que el mismo fiscal aporta", destacó ante Infobae en vivo.
Días además expuso todos las cuestiones no demostradas sobre la acusación en contra de su patrocinado. "Los restos óseos del joven fueron hallados en la propiedad de al lado. Ese es el primer error; no fueron hallados en la propiedad de Graf", argumentó. La razón que esgrimió fue que no se sabe cuál era el límite del predio en 1984.

"La última persona que lo ve con vida lo ve en la esquina de Monroe y Naón. Sabemos que iba al turno tarde, cursaba el segundo año de la M36, pero todavía no sabemos, incluso, si llegó a entrar o no al colegio", lanzó el abogado en otro momento, con un dato que evidenció algunos de los agujeros de la investigación. "No hay justamente ni prueba ni evidencia de que el señor Graf haya cometido estas acciones en función típica", remarcó.
Al mismo tiempo, el pedido del juez a la fiscalía fue "a efectos de no vulnerar la garantía del debido proceso, y evitar posibles futuras nulidades que pudieran entorpecer el avance correcto de este proceso", por lo que no quiere decir que no se vaya a avanzar en la imputación en un futuro, ya que inclusive confirmó que la investigación de López Perrando reúne "el estado de sospecha para recibirle declaración indagatoria a Graf y de las pruebas que existen al respecto".

La limitación fue "que no circunscribió adecuadamente los términos en que quiere que se lo intime al encausado". Por eso pidió que cada medida contenga "una hipótesis delictiva concreta, a partir de la cual el imputado podrá ejercer su defensa, y que los diversos actos procesales que eventualmente sucedan a la indagatoria" sean "respetuosos del principio de congruencia".

