05 Noviembre de 2015 19:05
Hace diez años se dibujaba una de las postales favoritas del kirchnerismo. El “No al ALCA” fue una decisión económica y una declaración de principios, un pacto sellado entre Néstor Kirchner, Lula, Hugo Chávez y Evo Morales.
Este jueves, Cristina Fernández recordó aquella Cumbre de las Américas del 4 de noviembre de 2005, cuando la región se negó a firmar el Acuerdo de Libre Comercio impulsado por George W. Bush.
El evento marplatense tuvo una gran repercusión en las calles de la ciudad, en donde se armó una multitudinaria “anti-cumbre”. Entonces, Néstor Kirchner habló del fracaso de "esa uniformidad que pretendía lo que dio en llamarse el 'Consenso de Washington'".
“Nuestro continente, en general, y nuestro país, en particular, es prueba trágica del fracaso de la 'teoría del derrame'", había dicho el mandatario.
El día que Kirchner enfrentó a Bush.
Aquel día, se había plantado ante el presidente estadounidense con frases como esta:
Las políticas que se aplicaron no sólo provocaron miseria y pobreza, en síntesis la gran tragedia social, sino que agregaron inestabilidad institucional regional que provocaron la caída de gobiernos democráticamente elegidos en medio de violentas reacciones populares, inestabilidad que aún transitan países hermanos.
El ex presidente criticó las políticas económicas impuestas desde el Primer Mundo.
El ex presidente también había denunciado las consecuencias nefastas que las políticas de ajuste estructural y del endeudamiento externo que se viven y recorren trágicamente el mapa de la inestabilidad latinoamericana. No se trata de ideología, ni siquiera de política, se trata de hechos y de resultados.
