por Alejo Paredes
29 Septiembre de 2025 12:28
La actriz Eugenia Guerty atraviesa un momento de plenitud. Con más de tres décadas de trayectoria en teatro, cine y televisión, hoy se luce como Lucy en "Cae la noche tropical", la obra de Manuel Puig adaptada por Santiago Loza y Pablo Messiez. Un espectáculo que desde su estreno en 2018 cosecha elogios de la crítica, funciones agotadas y un recorrido que incluyó escenarios de todo el país y hasta Miami.

En este contexto, la artista que brilló en clásicos como Toc Toc o en telenovelas como Padre Coraje y Campeones, asume el reto de darle vida a un personaje que la duplica en edad y que, según reconoce, la llevó a "caminar sobre la cuerda floja" entre la verosimilitud y el artificio. "El desafío de Lucy fue enorme: es un personaje treinta años más grande que yo, con muchísimo texto, que tracciona adelante casi toda la obra. Tenía miedo de que el público no creyera, que por momentos se dijera 'ay, pero no es de esa edad'. Y sin embargo, lo que me devuelve la gente después de cada función es que el personaje se sostiene. Estoy muy contenta con ese logro", confiesa.
La Luci de Guerty no nació en un vacío. En el escenario, la actriz trae consigo la memoria de su madre y de su abuela, mujeres que supieron resistir y seguir adelante en contextos adversos. "Me recuerda a mi abuela Esther y también a mi mamá, que no la tuvo fácil: sola, con cinco hijos, sin un oficio que le diera un estatus elevado, siempre atrás de un mango. Creo que son mujeres que se han parido a sí mismas. Y quise hacerles un homenaje", cuenta en diálogo con BigBang. Esa herencia femenina también se proyecta en los temas de la obra: el amor, la amistad, los vínculos que resisten al paso del tiempo.
Incluso, ese linaje femenino, dice, atraviesa el texto de Puig y el vínculo entre las hermanas protagonistas: Nidia (Leonor Manso) y Lucy (Eugenia Guerty), que pasan sus noches entre confidencias, recuerdos y los chismes sobre la vida amorosa de su vecina Silvia (Carolina Tejeda). "Las hermanas hablan de la vecina, de sus amores, pero en realidad terminan hablando de sí mismas. La obra es una celebración de la hermandad, de esas amistades que son como hermanos, de la ternura y la resiliencia", resume Guerty y agrega: "Es una obra llena de ternura, habla del amor, de la hermandad, del paso del tiempo y de la resiliencia".

También remarca "esa sabiduría que pasa de mujer en mujer". "El consuelo, la escucha, la frase de 'no pasa nada, amor, no te vas a morir' que tanto necesitamos escuchar", explica. En Cae la noche tropical, el paso de los años es más que un telón de fondo: es un protagonista silencioso. Y para Guerty, interpretarlo también fue un espejo que no dudó en confrontar. "Creo que todos los que actuamos nos volvemos atemporales. A los 25 podés colocarte en alguien de 50 u 80. Esa es la maravilla del teatro. Pero también me conectó con mi propia edad y con la idea de que tenemos que llegar a viejos lo más felices posible", reflexiona.
Sin embargo, durante la charla también se tomó unos segundos para cuestionar el mandato social que empuja sobre todo a las mujeres a ocultar la vejez a medida que van pasando los años: "Nos clavan la idea de que a los 50 tenés que seguir pareciendo de 40, y a los 60 de 50. Es rarísimo, antinatural y estresante. Tenemos que entender que llegar a viejos es una meta, no un descarte. Es nuestra propia meta como sociedad". A sus 50, Guerty no esquiva hablar de uno de los grandes temas de la obra: el paso del tiempo y la vejez. "Yo siempre digo: si tenés suerte vas a llegar a vieja. Entonces tratemos bien a nuestras viejas y viejos, a nuestros sabios".

Y agrega: "Porque al final es nuestra meta, no un descarte. Lo triste es cómo se bastardea esa etapa en la sociedad. Y sobre todo hacia las mujeres, a las que se les exige aparentar 45 cuando ya tienen 60. Es antinatural, estresante y sin sentido". Ese espejo, dice, también la interpeló en lo personal: "Hacer de Lucy me obligó a mirar mi propia edad desde otro lugar. Ella vive desde el disfrute, desde el orgullo de haber llegado hasta acá, con resiliencia. Y esa mirada es un regalo que me deja el personaje".
Con una carrera que recorrió distintos géneros y formatos -desde éxitos televisivos como Soy Gitano o Resistiré hasta películas como Granizo o No me rompan- Guerty no dudó tampoco al elegir dónde está su lugar en el mundo: "El teatro es mi casa matriz, mi refugio, mi primer amor. Es el aquí y ahora, el latido compartido con el público. Cada función es irrepetible, única. Eso no lo encontrás en ningún otro lenguaje. Para mí siempre fue mi casa matriz, mi primer amor, y sigo volviendo a él".
Y agrega: "Yo digo siempre que Argentina es la capital interplanetaria del teatro. Acá hay una producción inmensa, de gran calidad, y una resistencia que sostiene salas independientes a pesar de todo. Eso no lo ves en ningún otro país". Sin embargo, a la vez admitió que extraña cierta televisión que -sostiene- ya no existe: "Soy una nostálgica total de la tele de los 2000, cuando una novela llegaba a 30 puntos de rating. Convocaba a la familia, todos sabían quiénes eran los protagonistas".

Según explicó, "hoy cada uno mira su pantalla y su contenido, y algo del encuentro se perdió". "En esa época, además, el trabajo tenía otro valor: hacías un año entero en una tira y después tenías un tiempo de respiro. Hoy todo está precarizado. La tele tenía esa cosa de encuentro, de ídolos que todos conocían. Hoy está todo atomizado". En esta temporada, Eugenia Guerty celebra tres décadas de carrera en teatro, cine y televisión.
Una trayectoria que abarca desde sus inicios en Historias Breves II hasta éxitos como Tarascones, Agosto, El amor después del amor o Granizo. Pero al preguntarle qué queda de aquella nena que se disfrazaba todo el día y decía que iba a ser actriz, la respuesta fue contundente: "Me queda todo. Es lo que hago cada semana: ponerme un vestuario, una caracterización y actuar. Ese es mi refugio y mi éxito. Cumplir treinta años viviendo de la profesión, en Argentina, es un sueño cumplido".

Y sentencia: "Eso es un éxito en cualquier lugar del mundo. Mi sueño de chica está cumplido, pero también sigue vivo cada día que me subo al escenario". Cae la noche tropical se presenta cada sábado en el Teatro Hasta Trilce (Maza 177, CABA), con Eugenia Guerty, Leonor Manso y Carolina Tejeda como protagonistas.

