06 Septiembre de 2016 13:56
Atrapada en una difícil situación en Egipto, donde se sumió en un calvario luego de separarse de su marido, la argentina Carolina Pavón pidió ayuda del gobierno argentino para volver a nuestro país.
Carolina Pavón expuso su dramática situación en una entrevista radial.
Nacida en Misiones, la mujer estudió Antropología e, interesada por las culturas extranjeras, decidió viajar a El Cairo en el 2002. Allí conoció al contador egipcio Mahmoud Tarfa y se casaron al año siguiente.
Junto a su marido, Pavón regresó a Argentina con la intención de comenzar una familia. Pero luego de naciera Banseeh, la primera hija del matrimonio, y de que Tarfa intentara infructuosamente conseguir trabajo, ambos volvieron a Egipto.
Fue allí cuando la conducta del hombre se volvió violenta. "No me dejaba salir de la casa, me golpeaba, maltrataba, considerándome de su exclusiva propiedad", le contó a Radio News de Posadas en una carta enviada vía mail.
La llegada de Yuliana, la segunda hija, al hogar no mejoró la situación. El matrimonio volvió a intentar reestablecerse en Argentina pero el episodio terminó aún peor: Tarfa regresó solo a Egipto y, mediante amenazas, obligó a Pavón y a las niñas a volver al país africano. Poco tiempo después, la mujer decidió separarse de su marido.
La pesadilla
Sin embargo, su separación la puso en un lugar de suma vulnerabilidad. "Acá en Egipto la mujer vale mucho menos que un hombre", explicó Pavón. "El marido es dueño de su esposa y puede obligarla con la Policía a volver al hogar, por eso yo estoy refugiada en la casa de una familia amiga. Para hacer frente a mis gastos, hago tareas domésticas, lavo, cocino y cuido a un anciano que padece de varias enfermedades".
Pavón junto a su ex marido y sus hijas.
"Cuando aquí te hacen una restricción también te quitan el derecho a trabajar. La embajada argentina me está tratando de ayudar, pero hay bases legales que ellos no pueden saltarse", contó agregando que varias veces llegaron a bajarla del avión cuando quiso regresar a nuestro país.
Las hijas de Pavón, mientras tanto, aún viven con su padre. "No me deja verlas. Estoy aterrorizada, desesperada", describe la mujer. "Quiero volver a la Argentina pero tampoco puedo porque las leyes de Egipto me lo impiden. Comuniqué el caso a la Embajada argentina y ahora pido al gobierno de Misiones, donde nací, que haga algo en mi favor".
Gestiones de alto nivel
"Para que Carolina pueda ser ayudada y defendida necesita de una gestión de Estado, del propio presidente Mauricio Macri con la Cancillería, para que puedan empezar las negociaciones", explicó Gabriela Arias Uriburu, presidenta de la Fundación Foundchild, especializada en brindar ayuda a casos como el de Pavón.
"Tienen que ser negociaciones de muy alto nivel, donde participen organismos de Derechos Humanos. La situación debe ser tratada con un alto rango de integración", agregó. "Todo lo que se diga hoy es el camino del vínculo que se tiene que hacer de un Estado a otro".
