02 Octubre de 2015 17:48

Oscar De la Hoya llegó a Junín un lunes de septiembre a las 23 y se fue el martes a las 14. Viajó desde Los Angeles y permaneció 15 horas en Argentina. Apenas tuvo tiempo de descansar y dar una conferencia de prensa. Pero semejante movida para el presidente de Golden Promotions (y nada menos que 6 veces campeón del mundo) no fue casual. El empresario vino a mimar a su joya más preciada, Lucas Matthyse, que esta noche quiere quedarse con otro momento de gloria para el boxeo argentino. El chubutense intentará vencer al ucraniano Viktor Postol, en California, Estados Unidos, este sábado desde las 23. Televisa TV Pública.
En Carson, California, esperan por una de las veladas más relevantes que puede ofrecer el boxeo actual.
Pero el argentino no la tiene fácil. Matthysse y el invicto Postol lucharán por el título vacante que dejó el estadounidense Danny García, quien pasará a la categoría welter. "No me pesa la responsabilidad de ser la figura del espectáculo, como algunos me califican. No subestimo a mis rivales y los respeto”, destacó Matthysse en la previa del combate que cuenta con mucha expectativa.
Matthyse llega confiado y entrenado al combate frente al invicto ruso Postol, un hueso duro de roer.
Nacido en Trelew, Mathysse reside en Junín, tierra del manager Mario Arano, quien lo cobijó como un hijo. “Quería ser alguien, y lo intenté desde los 14 años. Agarré el bolso y me vine a Junín con el deseo de ser campeón del mundo”, recordaba sobre su vida. El chubutense es uno de los pegadores más destacados del boxeo actual. Tiene un 83% de KO, con 34 de sus 37 victorias obtenidas por la vía rápida. En las seis últimas peleas, ganó cuatro antes del límite, perdió una (Danny García) y en la más reciente (ante Ruslan Provodnikov, en abril de este año) se impuso por decisión mayoritaria.
El pesaje de Matthyse y Postol, en la previa de una pelea que promete lo mejor para amantes del boxeo.
La venta de la pelea
De cara al combate con Postol, advierte su confianza para quedarse con la corona. "Nunca estuve mejor que en este momento. Vencer a Postol será entrar en la puerta grande del boxeo mundial y para eso tengo que ganar. No me sirve que me digan que soy favorito, sólo me sirve hacer bien las cosas y no dejar dudas. Para eso nos preparamos", concluyó el hombre que le dedica cada pelea a su familia.