12 Noviembre de 2019 13:44
La oposición oficializó la convocatoria para que este miércoles en una sesión especial la Cámara de diputados vote el rechazo y repudio al golpe de Estado en Bolivia. El pedido cuenta con el respaldo de los diputados que forman parte del Frente de Todos. El único legislador de Cambiemos que respaldó el planteo fue Daniel Lipovetzky.
La sesión especial para repudiar el golpe a Evo Morales en Bolivia fue reclamada ayer por buena parte de la oposición, luego de un encuentro que hubo entre el canciller Jorge Faurie y diputados del kirchnerismo, entre quienes se encontraban Leopoldo Moreau, Andrés “Cuervo” Larroque y Mayra Mendoza, para exigir que el Gobierno exprese “de manera contundente el rechazo al golpe de Estado”.
La oposición busca que la Cámara baja sesione mañana a las 15.30 para aprobar una declaración en repudio al golpe de Estado. En total se presentaron cinco proyectos en la misma línea. Uno de los proyectos apunta a “expresar repudio al golpe de Estado perpetrado en Bolivia que obligó a la presentación de la renuncia del presidente Evo Morales y su vicepresidente Álvaro García Linera para preservar la paz”.
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Los proyectos fueron respaldados por diputados que integran el Frente de Todos, entre quienes se destacan Felipe Solá, muy cercano al presidente electo Alberto Fernández y quien suena como posible canciller a partir del 10 de diciembre. También hubo apoyo del presidente del PJ, José Luis Gioja, así como las diputadas Luana Volnovich, Cristina Álvarez Rodríguez, Mónica Macha, Victoria Donda, Alejandra Rodenas y Cecilia Moreau.Entre las firmas también aparecen Daniel Filmus, Daniel Arroyo, Agustín Rossi y Leonardo Grosso, entre otros, así como diputados del Frente de Izquierda y los Trabajadores, como Nicolás Del Caño.
CAMBIEMOS, DIVIDIDO POR EL GOLPE EN BOLIVIA
El único diputado de Cambiemos que firmó el proyecto para repudiar y rechazar el golpe de Estado en Bolivia fue Daniel Lipovetzky, del bloque del PRO. El domingo por la noche ya se había expresado en sus redes sociales y ayer por la mañana Alberto Fernández destacó que fuera uno de los pocos dirigentes del oficialismo en salir a repudiar lo que ocurría en el país vecino.
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Lipovetzky fue de los pocos legisladores que se expresaron en ese sentido. Otro fue Mario Negri, jefe del bloque radical, que señaló que lo que ocurría en Bolivia “sólo es compatible con golpes de Estado”. El senador electo Martín Lousteau dijo que “sólo la democracia soluciona los problemas de la democracia, no los golpes de Estado, reclamamos en Bolivia lo mismo que pidió la OEA: nuevas elecciones para que los ciudadanos decidan el futuro de su país”.El canciller Faurie, sin embargo, evitó describir la situación de Bolivia como un golpe de Estado y habló de “inestabilidad política”. Esta mañana, el presidente Mauricio Macri sostuvo desde la Casa Rosada que el gobierno repudia “la violencia de cualquier tipo y bajo cualquier circunstancia”. “Creemos en el diálogo como único mecanismo de salida de cualquier crisis, entendemos que las elecciones son la mejor manera de transparentar la voluntad del pueblo boliviano”.
